La Cámara Contencioso Administrativa de 2° Nominación, con la firma de las vocales María Soledad Puigdellibol y Daniela Sosa, ordenó registrar la presentación judicial de los vecinos de Villa Belgrano como “amparo ambiental”. A la par, dispuso la continuidad del trámite de la causa, esto es el tratamiento del amparo y la cautelar.
Cabe recordar que el recurso fue presentado por el Centro Vecinal del barrio de Villa Belgrano el pasado 12 de septiembre.
En la presentación, los vecinos inician “una acción de amparo ambiental en contra de la Municipalidad de Córdoba atento el daño al patrimonio natural, cultural e histórico que se está produciendo en el barrio”, con el objeto de que “el Tribunal ordene a la demandada a abstenerse de otorgar nuevas autorizaciones a emprendimientos inmobiliarios bajo la tipología de viviendas colectivas, condominios, centros comerciales, grandes superficies o similares, y que se revoquen las autorizaciones de obra otorgadas para la futura construcción de tipologías similares”.
Plantean en el escrito, patrocinado por la abogada Marcela Fernández, que las autorizaciones municipales no se ajustan “a la normativa ambiental y urbanística vigente; incurriendo en omisión inconstitucional por parte del Estado municipal de preservar el ambiente a través del desarrollo de un urbanismo sustentable, y hasta tanto se instrumenten los mecanismos legales de planificación participativa, se realicen los correspondientes procedimientos de Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) y se garantice la conexión al sistema de infraestructura de cloacas-, todo ello previo la realización de una Evaluación Ambiental Estratégica (EAE)”.
También solicitan, “respecto a las autorizaciones ya otorgadas, cuyos proyectos no estuvieren aún construidos, que sean revisadas en sus aspectos de legalidad y sustentabilidad, y eventualmente se ordene la readecuación de tales proyectos o su revocatoria”.
Mientras que, en relación a las autorizaciones ya otorgadas, y cuya construcción hubiere avanzado en forma total o parcial, piden que “las mismas sean revisadas y si no se ajustaren a la autorización otorgada se ordene su demolición. Si el avance fuera parcial y el proyecto admitiera su construcción parcial, que el permiso sea revocado para evitar la construcción futura de lo habilitado ilegal e ilegítimamente”.
Argumentan los vecinos que “todo ello es con el objeto de que municipio cese en su accionar lesivo del derecho al ambiente sano y equilibrado consagrado en la Constitución Nacional (art. 41 C.N.), esto es, comprensivo del patrimonio natural, cultural, paisajístico, histórico y urbanístico, en definitiva, de la calidad de vida de los vecinos del barrio”.
MEDIDA CAUTELAR
A la par del tratamiento del amparo ambiental y mientras se resuelva, los vecinos de Villa Belgrano reclaman “el dictado de una medida cautelar consistente en la suspensión inmediata de la construcción de las obras autorizadas, que estuvieren en trámite, o que se encuentran llevando a cabo en el barrio, y que, asimismo, tampoco se autoricen nuevos emprendimientos en la zona”.
Este tipo de protección jurídica es habitual durante el tratamiento de los amparos, ya que se solicita para que mientras se analiza el tema de fondo (la cuestión ambiental), no siga produciéndose el daño o porque la magnitud de la afectación puede resultar irreparable en el futuro.
Los vecinos piden además que “se ordene al municipio que se abstenga de autorizar la modificación y/o demolición de inmuebles históricos o con valor de patrimonio cultural y la remoción del arbolado en la zona; y que se abstenga de autorizar proyectos fuera de la normativa de uso de suelo, admitiendo “excepciones” a través de los denominados “convenios urbanísticos”, (…) o mediante el dictado de decretos en supuestos como: parcelas atípicas, áreas especiales o incrementos de edificabilidad del 25% por cloacas”.
Imagen de la construcción del complejo Saint Jordi en Villa Belgrano.
Por otro lado, y “como parte de la medida cautelar solicitada, atento a que no pudieron acceder a la información respecto de los proyectos inmobiliarios más cuestionados, piden se requiera a la Municipalidad los antecedentes, es decir, la copia de los expedientes administrativos que habilitaron” la construcción de una serie de proyectos y el acceso, en carácter de información pública -lo que fue negado sistemáticamente-, de un listado y los respectivos expedientes completos de los edificios o complejos habitacionales aprobados bajo la tipología de vivienda colectiva o vivienda individual agrupada, grandes equipamientos, housing, hoteles, etc. por excepción en los últimos diez años”. En esa línea demandan conocer “cuáles fueron las condiciones de concertación o concesión de las “excepciones” con las empresas para obtener las autorizaciones de las áreas municipales”.
Por último, hacen reserva “de solicitar la demolición de las obras a cargo de la municipalidad, para el caso de que eventualmente no se hubieran ajustado las construcciones a la normativa o concertación alguna”.
QUÉ PASA EN VILLA BELGRANO
Villa Belgrano es un barrio residencial, ubicado al noroeste de la ciudad. Sus límites los marcan el río Suquía por el sur y el este; la avenida Recta Martinoli por el norte; y la calle Lasalle por el oeste.
En la última década, su fisonomía, contexto ambiental y estilo de vida se han transformado progresivamente con los llamados “Housing” y emprendimientos inmobiliarios, algunos de ellos denominados “de altura”, con más de dos pisos, límite establecido para esta zona. También se ha intensificado el desarrollo comercial y de servicios.
Los vecinos a través del Centro Vecinal, la subcomisión de Ambiente del Centro Vecinal y el Grupo de Vecinos Autoconvocados vienen realizando, sin éxito, distintos tipos de reclamos administrativos y públicos ante la Municipalidad de Córdoba.
Un complejo de tres pisos de altura junto al patio de una vivienda residencial en Villa Belgrano.
LOS VECINOS LE HACEN FRENTE A LOS MEGADESARROLLOS INMOBILIARIOS
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Norberto
2 noviembre, 2023 a 18:29
Apoyo todo lo que sea clnserniente a apoyar v controlar el medio ambiente de aquellas medidad que las afecten en y perjudiquen el medio ambiente favoreciendo a grupos empresarios privados de, y pfaltos de decoro y vergueñza