El equipo de Facundo Muller no tuvo un buen partido y dejó pasar la chance de cerrar la serie, al caer por 98 a 83 frente a Regatas. El goleador del partido fue Santiago Scala con 23 puntos, mientras que Ramirez Barrios fue el mejor de los locales con 20 unidades. Con la serie empatada 2 a 2, “La Gloria” se juega la clasificación a semifinales este miércoles a las 21 horas en el Ángel Sandrín.
La segunda derrota consecutiva y en condición de visitante, encienden las alarmas del equipo de Alta Córdoba. Sin encontrar el ritmo que logró en el juego 2, Instituto volvió a demostrar flaquezas en el costado defensivo que lo marginaron rápidamente del juego, y encima nunca pudo encontrar una buena racha para dar vuelta la historia. En frente tuvo a un rival que hizo negocio en el primer cuarto (lo ganó 29 a 19), y a partir de ahí se mantuvo al frente con una personalidad que asusta; aprovechó mejor los momentos y encontró en Ramirez Barrios, Omar Cantón y Paolo Quinteros las respuestas que el equipo necesitaba.
Otra vez la clave estuvo en la defensa sobre los dos anotadores albirrojos. Ni Rodney Green, ni Luciano González fueron determinantes en el desarrollo, y padecieron la agresividad en la marca. El extranjero no convirtió tiros de campo y terminó con 1 punto (0/4), 4 rebotes, 1 asistencia en 21 minutos de acción. El mejor sexto hombre del año tampoco tuvo una buena noche y aportó 12 puntos, 5 asistencias, 1 rebote en 28 minutos, lanzando un 55% de campo (5/9) y un 50% en triple (2/4).
FACTOR X
En un partido que se definió por detalles, la diferencia estuvo en la aparición de dos jugadores que no están acostumbrados a liderar en puntos. Anoche Fabián Ramirez Barrios y Omár Cantón fueron el “Factor X” del partido, ya que con sus aportes individuales le permitieron a los correntinos cantar victoria y extender la serie a un quinto juego. El primero anotó 20 puntos con un porcentaje de campo del 77% (7/9), repartió 3 asistencias y consiguió 5 robos de balón, lo que significó un 28 de valoración en 30 minutos.
¡Lo puso a temblar! #LaLigaBancoComafi #PlayoffsLaCaja
En velocidad al ataque salió @ClubRegatasCtes, con el toma y dame entre Javi Saiz y @FabianRamBar que la hundió. Presentado por @MovistarArg pic.twitter.com/Y4aczhHOnL— La Liga de Básquet (@LigaNacional) June 4, 2019
El pívot que vino desde la banca, anotó más puntos que los minutos que estuvo en cancha. Cantón terminó con 17 tantos, lanzando un 75% de campo (6/8), estuvo perfecto desde la línea de tres (3/3) y consiguió 18 de valoración en solo 14 minutos. Es decir que entre los dos le aportaron 37 unidades al equipo, un número que demuestra el aumento en la producción si lo comparamos con los 51 puntos que sumaron entre ambos en los tres partidos previos.
SIN ADN
“La Gloria” padeció nuevamente la defensa agobiante que le planteó Regatas. Básicamente los cordobeses no pudieron circular la bola para encontrar a los tiradores, tampoco pudieron correr la cancha (solo 12 puntos de contraataque contra los 33 del local), Luciano González sufrió la doble marca y no pudo ser decisivo; y por último ni Facundo Piñero, ni Santiago Scala pudieron tomar buenos lanzamientos desde el perímetro, a pesar de que hayan convertido 7 entre ambos.
Anthony Smith se hizo un festín cada vez que cambiaban la marca. El extranjero anotó 20 puntos. Foto: La Liga.
El ADN está en peligro. Lucas Victoriano ha sido muy inteligente en cómo ha planteado la defensa, y le ha sacado protagonismo a cada uno de los actores principales del albirrojo. Además el equipo nunca se pudo sentir a gusto en el desarrollo del juego, y por eso se vio obligado a cambiar los sectores por donde hacer daño, como es el caso del juego interior con Esteban Batista (10 puntos) y Pablo Espinoza (12 puntos). Esa falta de comodidad se ve reflejada en las 18 pérdidas del equipo, el número más alto de los cuatro juegos.
Con la presión y tensión que genera un juego 5, Instituto deberá replantearse varios aspectos si quiere volver a dominar los ritmos del partido. En estos últimos dos juegos, Regatas demostró que fue ampliamente superior y le ganó ambos partidos jugando con soltura y personalidad. Esto hace que el margen de error sea cada vez menor, y Facundo Muller se vea obligado a aceitar las piezas para aprovechar la ventaja de localía que es un plus importante.
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