Alberto Fernández sintió en el estadio Orfeo que por primera vez jugaba de local en Córdoba. Una multitud empezó a llegar al estadio de Euclides Bugliotti apenas terminó la hora de la siesta y a llenar de a poco sus 10 mil lugares. Hubo mucha militancia, peronistas que van a votar a Hacemos por Córdoba y a la lista de “las 3 F” y también gente que simpatiza con el kirchnerismo. Banderas argentinas de a decenas y ritmo de redoblantes.
Fernández entró, saludó, y se tomó fotos y selfies con decenas de personas. Igual rutina hicieron Sergio Massa y Felipe Solá. La multitud empezó en modo escucha con el discurso de Alberto y a medida que profundizaba su planteo, empezó a bajar “Se siente, se siente, Alberto presidente”. Hubo varias ovaciones.
Hubo un par de momentos de alta emoción. Uno fue cuando criticó al gobierno nacional y a la gobernador de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, diciendo: “No entienden nada, nadie está gastando, estamos invirtiendo en el futuro de la Argentina cuando ponemos recursos en educación. El conocimiento nos va a hacer ricos”.
Otro, cuando recitó, el “yo elijo”, nacido para responder al contraataque oficialista de su cuestionamiento a las Leliqs y su propuesta de financiar los remedios gratis a los jubilados justamente con una reducción del pago de tasas de interés de ese bono con el que Guido Sandleris, el titular del BCRA, seca la plaza de pesos y llena los bolsillos del mundo financiero. Probablemente haya nacido para lo que resta de la campaña electoral, un hit: “Entre la educación pública y los bancos, elijo la educación pública; entre la universidad pública y los bancos, elijo la universidad pública; entre la salud pública y los bancos, elijo la salud pública; entre los jubilados y los bancos, elijo los jubilados; entre los que trabajan y los bancos, elijo a los que trabajan. Se a qué intereses tengo que representar y no voy a flaquear”.
Resta saber ahora, si sus cuatro visitas a la provincia pudieron revertir el rechazo al kirchnerismo, y si su impronta de peronista moderado le alcanza para seducir a los votos que fueron de José Manuel De la Sota. Es una de las incógnitas de este domingo electoral.