Natalia De la Sota protagonizó este sábado, con Alberto Fernández, una de las fotos más importantes de la campaña electoral en curso. Por su apellido y porque Córdoba es una de las dos provincias donde el peronismo local no se ha expresado orgánicamente por la fórmula de Alberto y Cristina Fernández de Kirchner. La imagen tiene la fuerza simbólica como para empujar al candidato del frente peronista en la provincia más macrista de todo el país.
En su muro de Facebook, la concejala y legisladora provincial electa, escribió el mismo sábado:
“En tiempos complicados como los que vivimos, la madurez política es vital para la Argentina. Por eso para mí, como cordobesa, aceptar la invitación de Alberto Fernández, era tan importante”.
“El concepto de tender puentes no puede quedarse solo en las intenciones, en las palabras. La grieta impide la convivencia. Mi papá ya había comenzado a recorrer el camino del diálogo y la reconciliación nacional, como la única forma válida de crecer como país y como sociedad”.
“No desconozco el sentimiento de los cordobeses con respecto a los desencuentros que vivimos durante tantos años con el gobierno nacional. Yo sufrí en carne propia esa mala relación. Estuve al lado de mi papá y acompañé cada decisión, cada reclamo que él llevó adelante para que no se ignorara a nuestra provincia. Y en este encuentro con Alberto Fernández se lo recordé”.
“Por eso valoro tanto su gesto de acercarse, y traigo conmigo su compromiso y su palabra de darle a Córdoba el lugar que se merece en la Argentina que viene, una Argentina unida y en paz. Es tiempo de mirar hacia adelante. Mi viejo así lo habría querido”.
Y cierra con el Hashtag #Puentes, el nombre del programa que estaba a punto de poner el aire el ex gobernador José Manuel De la Sota cuando falleció, hace casi un año, en un accidente carretero, volviendo desde Río Cuarto.
Alberto escribió en su cuenta de Twitter: “Muchas Gracias Natalia De la Sota. Unidos vamos a construir una Argentina federal e integrada. Córdoba será parte de ese país que todos soñamos, cómo lo soñó tu padre y cómo tu padre me lo inculcó a mí. Tienes junto a todos los cordobeses y cordobesas mi palabra y mi compromiso”.
La reunión se desarrolló cerca del mediodía del sábado en las oficinas que Sergio Massa tiene en Tigre. También estuvieron presentes el anfitrión y el diputado Eduardo “Wado” de Pedro, el representante de Cristina en la mesa de negociaciones del frente peronista, que integran además del kirchnerismo, los gobernadores del PJ, el Justicialismo nacional y el Frente Renovador de Massa.
Es tiempo de construir puentes para terminar con la grieta.
Es tiempo de una Córdoba y una
Argentina pensando en el futuro.#NuevaMayoría♥️🇦🇷 https://t.co/Xxl1na3D2j— Sergio Massa (@SergioMassa) August 24, 2019
Por cierto, no fue solo una foto. El viceintendente electo, Daniel Passerini, luego del encuentro, retuiteó el tuit de Natalia De la Sota. De este modo, el delasotismo se movió orgánicamente.
El encuentro se desarrolló en Tigre porque las conversaciones previas habían sido motorizadas por el propio Massa. Sin embargo, la presencia de Wado de Pedro confirma también los vínculos del kirchnerismo con el ex gobernador antes de su muerte y con el delasotismo luego.
De hecho, pese a que el kirchnerismo presentó públicamente a la bajada de la lista provincial de su sector para los comicios a gobernador del 12 de mayo, como una muestra de la decisión de evitar una victoria del macrismo y favorecer la unidad del peronismo, la realidad es que hubo una acción común con el delasotismo para que pudiera presionar internamente al gobernador Schiaretti en su puja por distintas candidaturas. Una vez que se confirmó la candidatura a viceintendente de Córdoba de Daniel Passerini, llegó la comunicación telefónica de Máximo Kirchner, que recibieron en Córdoba Gabriela Estévez y Pablo Carro.
Una “sorpresa”: la historia detrás del “volantazo” Kirchnerista en la provincia
Natalia y el desalostismo se sumaron a la fórmula de Alberto y Cristina y, en el tramo local, seguirán trabajando por la boleta corta de Schiaretti, que consiguió casi 17 puntos en las PASO y aspira a redondear los 20 en los comicios del 27 de octubre. De este modo, confirman la estrategia del gobernador y que en la provincia nadie saca “los pies del plato”.
Fernández y Massa consideran que este movimiento fortalece la campaña para “dar vuelta” el resultado en Córdoba, donde Juntos por el Cambio consiguió casi 49 puntos porcentuales contra los 30 de la boleta peronista. Córdoba y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, fueron los únicos distritos donde venció el presidente Mauricio Macri.
A su vez, condiciona a futuro a Schiaretti, que por el momento queda preso de su estrategia provincialista, que tiene por resultado equidistancia tanto con el presidente como con Alberto.
Primero fueron el senador Carlos Caserio y un grupo de medio centenar de intendentes, entre los que se estaca el de Villa María, Martín Gill, los que dieron el paso de trabajar desde el PJ por la fórmula del Frente de Todos. Ahora, fue el turno del delasotismo, un grupo con mayor profundidad y presencia simbólica en la sociedad cordobesa. El paso le da más densidad a la convergencia del PJ de Córdoba con el frente peronista. Si bien, el propio mandatario provincial es el que puso en la cancha este movimiento, que le permite recoger adhesiones por todas las vías y abrir vías de contacto también con el peronismo nacional sin perder, a la vez, su relación con Macri, las construcciones públicas desarrollan en el tiempo posiciones políticas. Habrá que ver impacto tienen en el reparto de poder de los años que vienen.