El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, sostuvo ayer que las fuerzas federales que fueron enviadas a Río Negro para asistir en la problemática de hechos violentos están “preparadas para trabajar como se les diga que tienen que trabajar”, y aseguró que esos efectivos se abocarán a tareas de de “cuidado de la región”.
“La vocación que tuvimos de ordenar al personal que ya teníamos alistado en La Pampa fue que se abocaran a tareas de cuidado de la región, patrullar y dejar tranquila a una parte de la población que la estaba pasando mal”, definió Fernández en declaraciones al canal C5N.
El funcionario resaltó que bajo su mando las fuerzas federales “no van a pegarle a nadie” en la provincia porque como ministro a cargo “respeta” a las fuerzas de seguridad.
“Las tropas están preparadas para trabajar como se les diga que tienen que trabajar, saben a qué van y que tienen el 100% de apoyo de los civiles y la tarea que tienen que llevar a la práctica”, manifestó Fernández, que además consideró que los hechos de violencia registrados en Río Negro constituyen un “delito provincial”.
El presidente Alberto Fernández analizó este sábado con la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, la situación en la zona andina de la provincia, donde se registraron hechos de violencia contra instituciones locales y nacionales, y ambos coincidieron en la necesidad de “llevar a cabo un trabajo en conjunto entre la Provincia y la Nación”.
La Casa Rosada decidió reforzar la seguridad en Río Negro con el redespliegue de fuerzas federales tras el incendio ocurrido durante la madrugada del martes en el Club andino Piltriquitrón, en El Bolsón, y con el objetivo de prevenir posibles nuevos conflictos.
—