Conéctate con nosotros

Hola que estas buscando

Cultura

Alejandro De La O: “La literatura infantil va más avanzada que el teatro”

Alejandro De La O, actor, docente y escritor. (Foto Gentileza Prensa La luna que miraba) (Enredacción)

Tener un diario íntimo y conducir un programa infantil eran los deseos de Alejandro De La O cuando era chico. Así, creció imitando a Flavia Palmiero y escribiendo en cuadernos o agendas. Hoy, a los 40 años, lleva una extensa trayectoria en el teatro infantil de Córdoba y acaba de publicar su primer libro, La luna que miraba.

También era un niño lector que devoraba las colecciones que venían en las revistas, que sin ser una familia lectora, sus padres le traían a casa. Además, su madre era una gran narradora de historias y una vez le contó una sobre la luna: “Si uno se la queda mirando un largo rato, es posible que otra persona también la esté mirando pensando en uno”. “Se me grabó”, reconoce el actor mientras espera los ñoquis caseros de Eva, su mamá, a donde va a almorzar los domingos y feriados. Además le inspiró La luna que miraba, el cuento que presentó en la Feria del Libro 2021, que trata sobre dos amigos que se encuentran en las vacaciones de verano, pero que viven en ciudades distintas y en la distancia miran la misma luna.

“Los libros despiertan cabeza, abren mundos. En ellos uno encuentra respuestas”, dice Alejandro, quien al igual que su recorrido profesional como actor y docente, su debut literario lo pensó para el universo de los más chicos. “Todo lo que hago va hacia a las infancias y son un hecho artístico”, le explica a ENREDACCIÓN.

Córdoba Turismo 2024

Hace más de dos décadas que se dedica al teatro, es parte del grupo EGOS con el cual han montado obras como El Conde DraScula, Romina Hood y El Fantasma de Clownterville. Además, de docente en escuelas primarias y secundarias, es promotor de la lectura con ferias barriales, congresos internacionales y como parte de una revista especializada. Entonces, a medida que conocía a más autores, que su biblioteca se agrandaba y con un cuento casi listo, le dieron ganas de publicar.

¿Escribir es habitual en vos?

Escribo desde siempre, pero como algo de la intimidad. Hasta que me fui animando a hacer algún taller, que incluso eran individuales, porque era algo muy para mí.

¿Te gustó ponerte en el lugar de autor?

Me encantó, aunque no sé si me siento escritor, soy un actor que juega a serlo. Soy muy ansioso y publicar tiene sus tiempos, desde que tenés el texto, la ilustración aparte, luego buscar quien te edite, después esperar a que se publique, me cuesta.

“El público infantil es muy genuino, muy verdadero”.

¿Al momento de escribir te sirvió más la mirada de actor o la de docente?

Todo es un combo. Que Nora Lía Sormani una de las mejores especialistas del teatro infantil, fuera mi editora, hizo que fuera perfecto. Por otro lado, la docencia también porque estoy en contacto todo el tiempo con niñas y niños, entonces conozco cómo se compartan, cómo sienten o viven ciertas cosas, y eso me facilitó contar la historia. El libro es como la cereza del postre de todo lo que hago.

Epec

¿Cómo es el público infantil?

Es muy genuino, muy verdadero, todo el tiempo necesita algo, absorbe energía y yo tengo una energía bastante activa, me gusta estar en ese mundo.

¿Todas las emociones se pueden abordar en el arte infantil?

Se puede recorrer cualquier emoción y contar cualquier historia, lo que hay que buscar es cómo contarla, la metáfora. Lo interesante es eso, es contar cualquier tema, sin subestimar a la niña o niño. Hubo un tiempo que se hablaba de temas tabú en la literatura infantil, que de hecho va más avanzada que el teatro. Como en teatro es el padre quien paga la entrada, siempre hay un intermediario, entonces, a veces cuesta correr el riesgo de abordar ciertas temáticas, como la muerte o la homosexualidad. Es poder abrir cabezas y animarse a que cualquier cosa puede ser tema, mientras esté bien contada y sea con seriedad en el arte, es hermoso.

El Grupo EGOS tiene más de veinte años, ¿qué ha ganado el teatro infantil en este tiempo?

Ganó, pero todavía falta mucho. Logró un territorio de historias mejor contadas, que no sea solamente el teatro infantil que hace reír, de mucho color y canciones, que no está mal, está bueno la obra de solo entretenimiento, pero también aquellas que hace que el niño se vaya pensando en algo, mover ciertas cosas. Falta, como te decía, la literatura va mucho más avanzada, en el teatro todavía hay prejuicios sobre ciertos temas. Va avanzando de a poco, hay grupos con propuestas muy lindas.

La luna que miraba

Entre Jazmines, alegrías del hogar y mandarinas nace la historia de Soledad y Marcelino. Un primer amor de verano que se teje entre chocolates, caramelos y vacaciones. Las niñas y niños lectores serán testigos fieles y silenciosos de este sentimiento profundo y único que va creciendo dentro de ellos. Un amor de mar, de jardines y de lunas.

Portada de “La luna que miraba”. (Foto Gentileza Prensa La luna que miraba) (Enredacción)

Ilustraciones de María Jesús Álvarez.

32 Págs.

Jacarandá Editoras. 

Haga clic para comentar

Comentario:

SIRELYF 80 años
Dossier360
Clima en tu ciudad
Columnistas

Te puede interesar

Noticias

El conflicto salarial entre los trabajadores municipales y el gobierno municipal aumenta en efervescencia. El Sindicato Único de Obreros y Empleados Municipales (SUOEM) convocó...

Noticias

La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), la CTA Autónoma Córdoba, y el Sindicato del Personal de Industrias Químicas y Petroquímicas (SPIQyP) convocaron para...

Noticias

Los legisladores provinciales, Dante Rossi y Sebastián Peralta (UCR, bloque Construyendo Córdoba) presentaron un proyecto de resolución que pide a los senadores nacionales por...

Novedades

Enclavada en un rincón único de la Patagonia, la ciudad de Esquel se transforma cada primavera en un mosaico de colores intensos y aromas...