La flamante titular de la Anses, Fernanda Raverta, nacida en 1976, es licenciada en Trabajo Social, egresada de la Universidad Nacional de Mar Del Plata, con una amplia trayectoria en el trabajo territorial en los diferentes cargos que ocupó tanto en el gobierno bonaerense y nacional como en el Poder Legislativo. Reemplaza al economista Alejandro Vanoli. También participó de la fundación de la agrupación de Derechos Humanos, Hijos.
Implica, en los hechos, un fortalecimiento de la presencia del kirchnerismo en la estructura del gobierno nacional en una agencia como la ANSES, clave para la política social, dado que administra jubilaciones, pensiones y asignaciones sociales, además del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS).
Raverta tiene “línea directa” con el diputado nacional Máximo Kirchner desde hace años, y una muy buena relación con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Es una de las principales dirigentes de La Campora, justamente la agrupación de la que el hijo de Cristina es fundador. Su llegada apunta a fortalecer la política social y territorial del gobierno frente a la profundidad de la crisis.
Es hija de una desaparecida, María Inés Raverta, quien militó en Montoneros y fue secuestrada y desaparecida por oficiales del Ejército en un operativo realizado en 1980 en Lima, Perú, en el marco del Plan Cóndor. Mientras que su padre es el empresario y ex dirigente Montonero, Mario Montoto.
Tras concluir sus estudios en Mar del Plata, se sumó a la agrupación La Cámpora y previo a los cargos legislativos para los que fue electa entre 2011 y 2019, primero como diputada provincial y luego nacional, se desempeñó como secretaria de Desarrollo Social del municipio de General Alvarado y también fue subsecretaria de Niñez y Adolescencia del Ministerio de Desarrollo Social bonaerense.
Como diputada nacional fue autora en 2017 del proyecto de ley sobre trombofilia, que busca garantizar el diagnóstico precoz y el tratamiento necesario para lograr un embarazo a término. Al año siguiente presentó el proyecto para restituir la ley de Farmacias que establecía quiénes podían instalar farmacias, norma que había sido derogada por el decreto de desregulación del gobierno de Carlos Menem.
Su paso por la Anses fue en el 2010, cuando se desempeñó como jefa de la Unidad De Atención Integral (UDAI) de ese organismo en el puerto de Mar del Plata.
En 2019, Raverta fue la candidata a intendenta del Frente de Todos en el distrito de General Pueyrredón, y tras perder la elección con el actual jefe comunal, Guillermo Montenegro, fue convocada por el gobernador Axel Kicillof para integrar el gabinete provincial.
Allí asumió al frente del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad (ex Ministerio de Desarrollo Social) con el desafío de hacer frente a una emergencia económica y social en la que el 40% de los bonaerenses se encontraba por debajo de la línea de pobreza.
Sin embargo, su llegada al gobierno nacional no fue bien recibida por los intendentes del Conurbano, que consideraban necesario ubicar a un dirigente propio en ese lugar, dada la incidencia que tiene en la formulación de políticas sociales y de inclusión. Se sabe, el GBA, es el área con más pobres -en número- del país y los intendentes creen que es necesario fortalecer su participación en las instituciones estatales que operan allí. Pese a ello, Fernández, que hizo campaña con Raverta en Mar del Plata, se decidió por ella para esta etapa de la doble crisis, la del coronavirus y la económica.
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