El Frente de Todos rechazó este jueves la idea de Juntos por el Cambio de realizar una sesión mixta, en la que algunos senadores estén presentes en el recinto y otros participen a través de videoconferencia, y ratificó el plan de la vicepresidenta y titular del Senado, Cristina Fernández de Kirchner, de debatir con la totalidad de los integrantes de la Cámara alta a distancia.
No obstante, la bancada oficialista aceptó la propuesta de la oposición de acotar la agenda parlamentaria para la modalidad de videoconferencia a cuestiones vinculadas con la pandemia de coronavirus.
La postura del Frente de Todos se dio a conocer a través de una comunicación dirigida a Fernández de Kirchner, en la que el bloque oficialista apoyó formalmente la idea que dio a conocer la presidenta del Senado a principios de esta semana.
La propuesta de la vicepresidenta consiste en que todos los senadores participen de una futura sesión a distancia y que al recinto sólo asistan Fernández de Kirchner, el secretario Parlamentario, Marcelo Fuentes; y el prosecretario Parlamentario, Juan Tunessi.
Los legisladores, en tanto, deberían estar conectados en forma remota vía videoconferencia en algún organismo oficial de su provincia, como una Legislatura, Concejos Deliberantes, Municipalidad o Gobernación que pueda garantizar una conexión a internet con un mínimo de 10Mbs de ancho de banda y personal informático para dar soporte.
En caso de que algún senador se encontrase imposibilitado de concurrir a alguno de esos sitios, debería certificar dicho impedimento en forma fehaciente y podrá realizar la conexión desde su domicilio.
La vicepresidenta notificó su proyecto este semana al jefe del interbloque de Juntos por el Cambio, el radical Luis Naidenoff; en una reunión a la que también asistieron el titular de la bancada oficialista, José Mayans; y la secretaria Administrativa de la Cámara alta, María Luz Alonso.
Dos días después, los legisladores de la oposición hicieron llegar su contrapropuesta en la que pedían que en el recinto, además de las autoridades de la Cámara, hubiera lugar para los jefes de los bloques y para una quincena de senadores, respetando una distancia prudencial, en tanto que los demás legisladores podrían participar de manera virtual.
La postura de Juntos por el Cambio fue rechazada por la bancada oficialista argumentando sobre una “hipotética situación en la que, sentados los 15 senadores en el recinto, concurren al mismo otros senadores con la voluntad de ocupar sus bancas para no sentirse discriminados”.
“¿Cómo se procedería en tales circunstancias? ¿Se cercenaría la voluntad de los senadores cuya participación en el recinto no estaba acordada?”, pregunta el escrito, y agrega que otra cuestión a tener en cuenta es que la presencia de un número considerable de legisladores “generaría la necesidad de convocar a una gran cantidad de trabajadores del Senado a fin de garantizar el adecuado funcionamiento del cuerpo, lo que pondría en riesgo a un mayor número de personas”.
No obstante, el oficialismo sí aceptó el resto de las demandas de la oposición, como la de acotar la agenda parlamentario para el funcionamiento virtual a “iniciativas legislativas vinculadas” a la emergencia por la pandemia de coronavirus “dentro del período que las circunstancias sanitarias así lo exijan”.
Los peronistas también manifestaron su coincidencia con respecto a que los legisladores que se conecten de forma remota puedan hacerlo desde organismos oficiales en sus provincias o desde sus domicilios particulares si las condiciones de conectividad lo permiten y que “se debe flexibilizar al máximo la lista de oradores y los tiempos de uso de la palabra”.
(Con información de Agencia Telam).
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