El comité capital y el bloque de concejales de la UCR cuestionaron con dureza el primer año de gobierno del peronista Martín Llaryora. “En la ciudad, tras un año de gobierno de Martín Llaryora, es evidente que falta un plan que beneficie a Córdoba. Muy por el contrario, el plan puesto en marcha hace un año se ve que no incluye obras y pretende tapar con pintura en los cordones cuneta, la inacción y la falta de las obras que Córdoba necesita. Es así: con esta gestión de Hacemos por Córdoba, la ciudad lleva un año sin obras para el centro y los barrios”, afirma el documento dado a conocer esta mañana.
Agrega la UCR y sus ediles, que “el intendente ya cumplió un cuarto de su mandato. Sí, un cuarto. Y perdió 365 oportunidades. Esperamos que no sea demasiado tarde”.
Para el radicalismo, con la pandemia, tanto “la ciudad de Córdoba como la Provincia, gobernada por Hacemos por Córdoba y Juan Schiaretti, entraron en un silencio rotundo y en la negación continua”.
Luego señalan que “cuando la ciudad de Córdoba necesitó y necesita un plan, ese plan llegó a través del marketing y la publicidad; pero hasta el momento, sin políticas públicas que refuercen esa invitación del gobierno municipal que dice “juntos tenemos futuro””.
En ese sentido, plantean que “nos gustaría saber dónde está ese futuro, porque aún no lo vemos, ya que el desmedido aumento de impuestos municipales y el deterioro de los servicios públicos no respaldan en absoluto esa supuesta invitación al futuro”.
Señalan, en relación a los servicios que brinda la gestión de Llaryora, que “fue histórica la falta del servicio urbano de pasajeros. Por primera vez en su historia, nuestra ciudad no contó con el servicio esencial de transporte para los trabajadores y trabajadoras” y denuncian que “aquellos que forman parte del sistema de salud, siguen dando en soledad una batalla que parece no tener fin, porque el gobierno de Hacemos por Córdoba les da la espalda”.
Finalmente, el radicalismo apunta que “el discurso de la “firmeza” del intendente Llaryora se desvanece cuando esconde a los más de 2000 trabajadores que metió de manera informal a la Municipalidad de Córdoba. Aunque lo haya tapado con marketing y pauta monstruosa que pagamos todos los cordobeses, por “derecha” anunció algunas decisiones respecto a los empleados públicos de la ciudad y, por izquierda, se vino un aumento informal del empleo público. Queda en evidencia que el relato se cae, cuando el intendente habla de transparencia pero no continúa la política de Gobierno Abierto y rendición de cuentas, y hasta con las contrataciones directas que pasan sin ninguna discusión en el Concejo Deliberante”.
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