Mario Negri, Pedro Dellarrosa, Rogelio Frigerio, Héctor Baldassi, Luis Juez y Ramón Mestre en Marcos Juárez, en una escena de la última campaña electoral. Por el momento, nada indica que vaya a haber acuerdo y la interna toma cada vez más cuerpo.
El sábado, Mario Negri y Héctor Baldassi anunciaron que concurrirán juntos a la interna de Cambiemos si finalmente no hay consenso para determinar el candidato en Córdoba de la alianza oficialista nacional. Ayer, fuentes del mestrismo y del PRO coincidían en que el diputado nacional Gabriel Frizza y la senadora Laura Rodríguez Machado aparecían con más fuerza en la carrera por acompañar al intendente Ramón Mestre. Pese a ello, no eran los únicos nombres que se analizaban para componer la boleta principal del acuerdo entre el núcleo principal de la UCR y la mayor parte del partido del presidente Macri. Mientras que el alfonsinismo, el otro grupo radical en pugna, ya adelantó que presentará una formula 100 por ciento radical, pero aun no dio a conocer quién sería el eventual compañero de fórmula de Dante Rossi.
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Pese a las definiciones, el PRO aún no firmó la composición de la alianza Cambiemos en Córdoba y presiona para que se alcance una fórmula por consenso, como demanda el jefe de Gabinete Marcos Peña, el operador principal de Mauricio Macri en la mesa Política del PRO. En cambio, el presidente de la UCR, Alfredo Cornejo, gobernador de Mendoza, si bien sugirió esa vía, apoya la decisión de Mestre de enfrentar la decisión del gobierno nacional que prefiere al titular del interbloque de Diputados de Cambiemos en la cámara baja y al ex árbitro de fútbol en la cabeza de la lista que enfrente a Juan Schiaretti. Para los radicales, el acuerdo sin interna es una posibilidad más, pero no le escapan a la idea de una elección para definir las candidaturas. A ello se le agrega que Mestre es, por el peso territorial de la capital cordobesa que gobierna, y por su cercanía con el porteño Martín Lousteau, un jugador relevante en el mapa de la UCR.
Según una fuente legislativa de la UCR, “la posición del partido es firme porque es el momento de marcarle la cancha al presidente; no hay más espacio para que tomen las medidas de gobierno y después nosotros nos enteremos por los diarios. Este es un modo de decirlo”.
En un comunicado dado a conocer el sábado, Negri y Baldassi, afirman que “se necesita una actitud amplia y generosa, capaz de entender que lo que está en juego es el futuro de Córdoba, no el de ningún dirigente en particular”. Se trata de una sociedad potente en términos electorales. Baldassi le da a Negri, un representante genuino de la clase política, un baño de anti-política, a la par que le agranda el espacio social que puede alcanzar. A su vez, el radical puede mostrar un conocimiento de la gestión y el poder que el ex-árbitro no puede esgrimir. Esa complementariedad es un atributo esencial.
Afirman que “hacemos un llamado y persistiremos hasta el último momento posible para llegar a un acuerdo entre todos los dirigentes y espacios que conforman Cambiemos” y “de no ser así, participaremos juntos en la interna abierta prevista para el próximo 17 de marzo siempre y cuando se realice con reglas claras y absoluta transparencia”.
Negri se saluda con Juez y Baldassi.
Señalan además que “estamos recorriendo la provincia, escuchando a todos los vecinos y contándoles cara a cara cada una de nuestras propuestas” y apuntan que “estamos comprometidos y acompañando -aún en medio de todas las dificultades- al Gobierno Nacional, que tanto ha ayudado a Córdoba para terminar definitivamente con los fantasmas del pasado que saquearon nuestro país”.
Luego dicen que “coincidimos en la necesidad de ofrecerle a los cordobeses una alternativa competitiva y transparente, que diga la verdad, que termine con el continuismo y con el uso abusivo de los recursos del estado y del marketing” y expresan que “la constante especulación electoral del Gobierno Provincial, el cambio de reglas de juego, la falta de diálogo y la peligrosa exaltación del culto a una persona no serán un impedimento para quienes creemos que el cambio es posible si construimos junto a todos los cordobeses una propuesta honesta, seria y responsable”.
Mientras que la mayor parte del PRO acompaña a Mestre. La interna “amarilla” es el otro componente de la definición, ya que el PRO orgánico no tiene una buena relación con Baldassi. Por lo tanto, el acuerdo Negri-Baldassi-Luis Juez, puso a buena parte de la estructura partidaria de este partido del otro lado de la mesa, junto a Mestre. Se le suman coincidencias de la gestión común de los intendentes, uno de los ejes de la estructura de poder de Cambiemos para el comicio. Sin embargo, uno de los puntos a tener en cuenta para el caso de que haya disputa electoral el 17 de marzo, es la orden que baje desde Buenos Aires. Por el momento, cada uno se posiciona de acuerdo a los intereses locales.
El diputado nacional, Gabriel Frizza junto al presidente Mauricio Macri.
Frizza, que tiene origen radical, gobernó Jesús María y actualmente es diputado nacional. Es un dirigente de buen trato con Mestre y con “peso territorial” en una de las regiones con más peso electoral detrás de la capital, como es el departamento Colón. Pertenece como el intendente capitalino a la generación intermedia de su partido y le aporta imagen de hombre de diálogo, un factor importante en el imaginario del electorado no-peronista. Su costado negativo, es que no tiene el nivel de conocimiento de Baldassi.
Ramón Mestre en el centro. A su lado el diputado Gabriel Frizza (camisa azul), la intendenta de Jesús María, Mariana Ispizúa, y la senadora Laura Rodríguez Machado. Fue en el último Festival Nacional de la Doma y el Folklore de Jesús María.
Rodríguez Machado, la otra dirigente que aparece con posibilidades de componer la fórmula con Mestre, agrega el valor de representar la creciente incidencia de la agenda de género en la política. Tiene en contra, al igual que Frizza, su bajo conocimiento en la opinión pública, su escaso desarrollo territorial y un perfil político similar al intendente. Es decir, no ensancha a Mestre hacia el centro del escenario político. Sin embargo, en las campañas modernas, el potencial electoral no depende sólo de la estructura partidaria, sino también de la capacidad de representar a la opinión de colectivos ciudadanos o temáticas relevantes.
Pese a ello, en el bunker mestrista, admitieron a este medio que se analizan más nombres para la fórmula que eventualmente iría a la interna. “Hay tiempo, pero hay que evaluar todas las posibilidades. La lista no sólo debe ser fuerte para la interna, sino fundamentalmente para enfrentarse con (Juan) Schiaretti el 12 de mayo”.
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