El gobierno nacional adelantó a inversores extranjeros que luego de las elecciones de octubre avanzará con la reforma laboral. Para ello, dijo contar con el apoyo del peronista Miguel Ángel Pichetto, candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, y otros dirigentes peronistas.
La afirmación fue realizada en una reunión cerrada en Nueva York, Estados Unidos, con la organización de Goldman Sachs, por el ministro de Economía, Nicolás Dujovne, y el vicepresidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Gustavo Cañonero. De la actividad participaron unas 250 personas, pertenecientes a fondos de inversión y bancos. La parada en una de las capitales financieras del planeta, se dio en la previa de la reunión del G-20 en Japón.
Cañonero es un clásico lobo de Wall Street, que se desempeñó antes de llegar al BCRA como director del Grupo SBS, socio de Templeton, un fondo de inversión local. También trabajó en el FMI, en el banco de inversión neoyorquino Salomon Brothers y en el Deutsche Bank, donde fue compañero de Luis Caputo.
Además, el analista Alejandro Catterberg, de Poliarquía, presentó un informe sobre el panorama pre electoral en el que remarcó que la confianza de los consumidores subió 10 puntos porcentuales este mes respecto de mayo.
Poliarquía viene publicando además, una serie de encuestas en las que afirma que la imagen positiva del Presidente, subió del 28% hasta el 34% en el último mes.
Dujovne dio por hecho que Mauricio Macri logrará la reelección. En ese sentido, adelantó medidas del gobierno para el hipotético segundo mandato, donde prometió que avanzarán con las reformas laboral y previsional.
Dujovne aseguró que el oficialismo está en una “posición muy sólida para ganar las elecciones” porque mantuvo la alianza con los radicales y sumó a Pichetto, lo que les permitirá “aumentar la gobernabilidad en un futuro gobierno”. Y agregó que Cambiemos sumó 14 puntos de intención de voto en los últimos dos meses, lo que equiparó con el crecimiento previo a la legislativa del 2017.
Después de ese triunfo seguro que proyectó para octubre, Dujovne les prometió a los inversores que será el tiempo de las reformas y dijo que el Gobierno tendrá mayor capacidad de implementarlas con el apoyo de Pichetto y parte del peronismo.
En ese sentido, el ministro planteó que los gobernadores no apoyan a Cristina y prefieren a Macri, a pesar de que ninguno se animó a llevarlo en su boleta y hasta los propios desdoblaron elecciones.
También recordó que en 2017, con minoría en el Congreso, lograron imponer “pequeñas” reformas en lo laboral, previsional e impositivo.
Por otro lado, justificó la lentitud de las reformas económicas, en la necesidad de desmantelar “las bombas de tiempo que dejó el kirchnerismo”.
El ministro también les prometió a los inversores que Macri cerrará el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea, y que tanto Brasil como Argentina coinciden en que hay que reducir los aranceles del bloque regional. “Los cambios deben ser muy agresivos en la apertura de la economía y la reducción de aranceles”, señaló.
Dujovne también aseguró que la economía argentina está rebotando y que el PBI creció en el segundo trimestre y seguirá mejorando en el tercero. Arriesgó que el crecimiento podría ser positivo este año, empujado por las exportaciones agrícolas y de energía.