Una encuesta nacional realizada a finales de abril revela la profundización de la división de la opinión pública respecto de las expectativas sobre el curso del gobierno del ultraderechista, Javier Milei. También muestra que los principales referentes opositores son los bonaerenses, Sergio Massa (Frente Renovador) y el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof (peronismo). En un segundo lote, aparecen la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, el ex secretario de Comercio del gobierno de Néstor Kirchner, Guillermo Moreno, y el radical, Martín Lousteau.
El trabajo de opinión pública fue realizado por la consultora Circuitos, entre 26 y el 27 de abril últimos. La muestra es nacional, se realizó por teléfono y metodología IVR, reúne 1261 casos, y posee un nivel de confianza del 95% y un error muestral de +/- 4,3.
Un dato clave que facilita la sostenibilidad de las políticas del oficialismo, es la dispersión opositora que revela el informe. Massa y Kicillof son vistos por el 24,5% de los argentinos como los principales referentes opositores. El primero acumula un 24,5% de respuestas positivas y el segundo un 23,2%. Si bien ambos pertenecen al amplio espacio del peronismo, abrevan en dos líneas y perfiles diferentes. El tigrense es un hombre del centro político y el gobernador es un fiel representante de la centro-izquierda del movimiento fundado por el ex presidente Juan Domingo Perón.
Luego aparecen otros dos peronistas, CFK con un 13,7%, y Moreno con un 11,9%. No es casual la visualización del ex funcionario de la administración de Néstor por parte de la sociedad: Se ha convertido en un columnista fijo de C5N y ha ganado en relevancia pública.
El radical Lousteau con 11,2%, que ha hecho de su oposición al DNU 70/2023 y la Ley Bases un “leiv motiv” de su rol de alfonsinista opositor a Milei, es la sorpresa de la medición. Es el único no peronista que es visualizado por la sociedad en la vereda de enfrente de la alianza del libertario Milei con el Pro, y la UCR y el peronismo de centroderecha, entre otros sectores. También gana importancia esa cifra, porque es el único radical que logra vida propia incluidos los gobernadores y dirigentes que convergen en la alianza oficialista.
Mientras que la trotskista Myrian Bregman reúne 5,7% de respuestas, y un 9,8% señala que “aún no lo sabe”.
Se trata de los primeros valores respecto del pensamiento social y las preferencias dirigenciales en relación al tipo de oposición que debe medirse con la feroz política neoliberal que aplica el gobierno nacional. Justamente es notoria la amplitud de los perfiles, lo que indica la existencia de un tiempo temprano de construcción del espacio opositor a Milei. Es decir, todavía no se han consolidado tendencias, ni dirigentes, por lo que pueden aparecer otros perfiles y otros nombres a medida que se desarrolle la gestión libertaria.
OPTIMISMO Y CONFIANZA VERSUS SALARIOS Y JUBILACIONES
La encuesta de Circuitos que conduce Pablo Romá midió que el 49% de los consultados tiene “optimismo y esperanza” frente a la situación económica del país, contra un 17% que manifiesta “preocupación e incertidumbre” (el grupo blando o intermedio), y un 31,3% que expresa “pesimismo y enojo” (el opositor).
En esa línea va otra de las preguntas del trabajo: Un 42,1% apunta que “tiene confianza” en el presidente Milei contra un 36% que señala que “no tiene confianza” y un 15,9% que dice tener “poca confianza”.
Sin embargo, cuando se consulta a los encuestados ¿Qué cree que debería pasar con los salarios y jubilaciones?, el 47,9% afirma que “deberían superar la inflación”, el 42,5% que “deberían acompañar a la inflación” y sólo un 2,4% dice que “deberían quedar por debajo de la inflación”.
Se podría afirmar, que la cita de “Dato mata relato” no estaría corriendo para la consideración social del gobierno, ya que por el nivel de optimismo le cabría mejor “Relato mata dato”.
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