El Ministerio de Seguridad pondrá a disposición de las fuerzas de seguridad tecnologías con inteligencia artificial (IA) con el argumento de reforzar el combate contra el delito físico y cibernético. La nueva medida es polémica. Por lo que se conoce hasta el momento, avanza sobre la legislación vigente que, entre otras actividades, impide la inteligencia interior; o sobre preceptos constitucionales, como la garantía del derecho de libertad de expresión o el derecho a la intimidad.
En principio, las actividades que plantea, como concepto general, convierten a todos las personas que son usuarias del cyberespacio en objetos de investigación o sospechosos potenciales, cuando el principio de los sistemas democráticos y republicanos, es la excepcionalidad. Es decir, se investiga a quien o a quiénes están acusados de cometer un delito, no a todas las personas del país. Por ese motivo, por ejemplo, las intercepciones telefónicas deben ser autorizadas por la Justicia.
La resolución fue publicada en el Boletín Oficial. Así, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich creó una “unidad de inteligencia artificial aplicada a la seguridad” con la misión de prevenir, detectar, investigar y perseguir delitos y sus conexiones mediante el uso de IA.
La nueva unidad tendrá especialistas de las cuatro fuerzas federales -Policía Federal, Gendarmería, Prefectura Naval Argentina y Policía de Seguridad Aeroportuaria-, aunque también participará el Servicio Penitenciario Federal (SPF) bajo la órbita de Ciberdelito y Asuntos Cibernéticos del Ministerio de Seguridad.
“El delito cambia todo el tiempo. El Gobierno de Javier Milei siempre va a estar un paso adelante”, afirmó el portavoz presidencial, Manuel Adorni, en la conferencia de prensa que brinda a diario en la sede del Ejecutivo.
Según el gobierno, esta tecnología permitirá patrullar las redes sociales abiertas, aplicaciones y sitios de Internet y la llamada ‘Internet profunda’ o ‘dark web’, así como la detección de situaciones de riesgo grave para la seguridad.
También, facilitará identificar y comparar imágenes en soporte físico o virtual y analizar imágenes de cámaras de seguridad en tiempo real a fin de detectar actividades sospechosas o identificar personas buscadas.
Otra actividad que realizaría es utilizar algoritmos para analizar datos históricos de crímenes y así prevenir futuros delitos; identificar patrones inusuales en las redes informáticas y detectar amenazas cibernéticas antes de que se produzcan ataques, y analizar actividades en redes sociales para detectar amenazas potenciales, identificar movimientos de grupos delictivos o prever disturbios.
Asimismo, permite procesar grandes volúmenes de datos de diversas fuentes para extraer información útil y crear perfiles de sospechosos o identificar vínculos entre diferentes casos y detectar transacciones financieras sospechosas.
También, la resolución propone patrullar mediante drones áreas extensas, proporcionar vigilancia aérea y responder a emergencias y realizar tareas peligrosas, como la desactivación de explosivos, mediante robots.
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