El candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández, aterrizó ayer en Buenos Aires, procedente de España y Portugal, y desde el mediodía comenzó a delinear sus próximos pasos de campaña con vistas a los comicios del 27 de octubre. El esquema general es potenciar la presencia en las zonas donde es posible mejorar la elección del 11 de agosto. El primer paso será en Tucumán, donde tratará de dar el puntapié inicial a la idea de pacto social entre los sectores productivos y de trabajadores en el aniversario de los 50 años de la UIT (Unión Industrial de Tucumán).
La convocatoria contará con la participación del presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, y el secretario general de CGT, Héctor Daer, entre otros referentes cegetistas. El tejido y el tema del encuentro fueron obra de José Manzur y el tigrense Sergio Massa. El peronismo considera fundamental establecer acuerdos básicos de precios y salarios, entre otras variables, para poder salir de la crisis que atraviesa el país.
Otros lugares clave son Córdoba y Ciudad de Buenos Aires, distritos donde perdió, pero en los que existen expectativas de mejorar el desempeño electoral. También viajará a Mendoza, a apoyar a la candidata a gobernadora, Anabel Fernández Sagasti, que tiene grandes posibilidades de disputarle la gobernación al radical Rodolfo Suárez.
En Córdoba estará el domingo, adónde llegará con Sergio Massa para participar de una misa organizada por la familia del ex gobernador José Manuel De la Sota, al cumplirse el primer aniversario de su fallecimiento en un accidente automovilístico. En la catedral cordobesa estará como amigo de la familia, al igual que Massa, pero sin duda su presencia y la del gobernador, Juan Schiaretti, entre otras figuras del peronismo, convertirán a la ceremonia en uno de las principales movidas políticas de este mes. Los operadores políticos del PJ de Córdoba y del candidato del Frente de Todos, especulan con que haya una foto durante el encuentro.
Carlos Caserio también estuvo ayer en las oficinas de Fernández en San Telmo. Si bien todavía no fue confirmada la agenda de visitas a la provincia, habrá otras, con la intención de seducir el llamado “voto campo”, el núcleo de la fortaleza electoral del presidente Mauricio Macri desde 2015.
Fernández intenta en la provincia, construir un vínculo positivo con los productores agropecuarios, los más reacios al regreso del peronismo al poder. Si bien su propuesta no incluye bajar las retenciones a causa de la crisis que vive el país, su planteo conceptual es que el campo y su complejo agroindustrial asociado son fundamentales para generar divisas y poner en marcha la economía.
Por último, en la Ciudad de Buenos Aires, el comando peronista cree que Matías Lammens puede llegar al ballotage con el actual jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta. A partir de ello, es que Alberto dedicaría una parte de su agenda a apoyar al presidente de San Lorenzo, justamente en sus actividades en los barrios de clase media alrededor del eje de la avenida Rivadavia, donde la oposición tiene mayores posibilidades de crecimiento en la capital argentina.