Una poderosa banda narco “multinacional”, liderada por un comerciante nacido en Bolivia y con integrantes oriundos de Perú y nuestro país, que operaba en Córdoba Capital, fue desbaratada este viernes. Fueron detenidos ocho de sus miembros (siete hombres y una mujer), entre ellos el que se cree es su jefe. Se realizaron 14 allanamientos y se incautaron 70 kilos de cocaína, una millonaria suma de pesos y dólares, armas y balas especiales, y varios autos. Sin embargo, por el volumen de droga secuestrada, se cree que el grupo podría tener otras ramificaciones, tanto hacia arriba como hacia abajo de la estructura desarticulada.
El fiscal Carlos Cornejo explicó al Show del Lagarto (El Doce) que la investigación comenzó a partir de sospechas en uno de los supuestos integrantes de la organización, de nacionalidad peruana, que ya había sido condenado en otra causa de drogas.
Sumado a esa pista, los investigadores profundizaron en la figura del presunto líder boliviano (sin antecedentes penales), que está radicado en Córdoba desde hace 35 años. Si bien aparentemente se dedicaba a la venta de pintura, sus propiedades (incluido un campo en Rayo Cortado) y su costoso estilo de vista eran “inconsistentes” con sus ingresos, lo cual encauzó la atención hacia su posible participación en la comercialización de estupefacientes y las posteriores ganancias.
Los 14 allanamientos realizados por la Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA) se desarrollaron en los barrios Centro, Villa Martínez, Argüello y Ameghino Sud, de la capital cordobesa. Además, se trabajó en la Comuna San Roque y en la localidad de Malvinas Argentinas (en una fábrica perteneciente a uno de los investigados investigado).
En los domicilios, se logró secuestrar 491.564 dosis de cocaína (más de 70 kilos) y 45 de marihuana, una planta de cannabis sativa, dinero ($21.027.170 y 153.731 dólares), tres automóviles, una motocicleta, un arma de fuego y diferentes elementos relacionados a la causa. El valor de todo lo secuestrado asciende a $1.725.915.570, alrededor de 1,72 millones de dólares al tipo de cambio oficial.
La relevancia de la banda se puede observar en que fueron secuestrados cartuchos con encamisados de teflón que sirven para perforar chalecos anti-bala como los que usa la Policía.
Según se pudo establecer, había una compartimentación de la operación. En cada vivienda se ejecutaban funciones diferentes. En algunas, se desarrollaba el fraccionamiento y en otras se acopiaban los estupefacientes. Se determinó, además, que luego del fraccionamiento, la droga era distribuida en distintos puntos de venta de la Capital Provincial.
A su vez, la droga secuestrada tenía dos “marcas” o “sellos” que son utilizados por los proveedores para garantizar la “trazabilidad” de su producto. En este caso, la cocaína estaba envuelta en papel amarillo, con los sellos “Zaragoza” y “Gallo”. Los investigadores tratan de determinar ahora la procedencia de la cocaína.
Los paquetes con cocaína y el sello de sus productores. (Foto: FPA).
Por último, la Fiscalía de Lucha contra el Narcotráfico del Tercer Turno ordenaron la remisión de lo incautado y el traslado de los aprehendidos a sede judicial por Comercialización Agravada de Estupefacientes.
Otra imagen de la cocaína secuestrada en 14 allanamientos.
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