Las fuertes ráfagas de viento Zonda que azotaron desde este sábado con mayor intensidad distintas zonas de Mendoza, causaron un importante incendio en el piedemonte mendocino, que obligó a evacuar barrios vecinos; árboles, ramas y postes caídos, y generó cortes de energía, mientras que Nación envió aviones hidrantes para combatir el fuego, informaron fuentes oficiales.
El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, mediante el Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF), envió dos aviones hidrantes, para sumarse a las tareas de combate de incendios.
Los recursos aportados por Nación fueron enviados a solicitud de la provincia, cuyas fuerzas locales trabajan en conjunto con los equipos nacionales.
Por su parte, en la tarde de este domingo, con la presencia del gobernador Rodolfo Suarez, se realizó una reunión estratégica para aunar esfuerzos y recursos en el combate de los focos activos de incendio.
Según detalló la gobernación mendocina, además de los aviones hidrantes, se ha coordinado el desplazamiento de bomberos voluntarios desde otras provincias para brindar apoyo en tierra.
Pese a las condiciones climáticas adversas, ya se encuentran operativos los dos aviones hidrantes enviados, que dieron inicio a las tareas con ráfagas de 80 km por hora.
“Esto es porque hay una pequeña ventana que permite que puedan despegar”, explicaron desde la Secretaría de Ambiente local.
Uno de los momentos más dramáticos fue por el incendio que se desató en el piedemonte en la noche del sábado, cerca de las 22, y el foco comenzó entre la Reserva Divisadero Largo y los alrededores del barrio Nuevas Quintas, cuyos vecinos fueron evacuados por precaución.
En relación al incendio en el piedemonte mendocino y El Challao, el director de Defensa Civil de la provincia, Daniel Burrieza, informó que estaban trabajando los Bomberos del Cuartel Central y de Las Heras, con apoyo de los Bomberos Voluntarios de Lavalle, Godoy Cruz, Guaymallén, Palmira, Barriales, Maipú, Rivadavia y Tunuyán, entre otros.
Si bien durante las primeras horas de la mañana el incendio al oeste de la Ciudad parecía prácticamente contenido, luego se reavivó debido a las altas temperaturas y las ráfagas de viento. “Nos ha cambiado un poco la situación porque ha habido varios reencendidos y ha empezado correr viento nuevamente y las operaciones que estábamos haciendo con el helicóptero Halcón (con un bambi bucket, dispositivo que permite transportar y descargar agua) tuvieron que ser suspendidas por las condiciones de viento”, dijo este mediodía Daniel Burrieza, director de Defensa Civil.
Añadió que estaban reorganizándose con brigadistas y bomberos “para tratar de evitar que el fuego se propague especialmente a las zonas donde hay barrios”.
“Durante primeras horas de la noche era un incendio descontrolado, con mucho calor y llamas altas y lo que primero hicimos fue salvaguardar la integridad de las personas por lo que evacuaron las casas que estaban con mayor peligro”, afirmó Burrieza, y dijo que no “hay víctimas” producto de los focos ígneos.
En tanto, en la tarde de este domingo se podían ver columnas de humo y llamas, cercanas a algunas viviendas y vecinos se sumaron a los socorristas para intentar frenar el incendio.
Diego Martí, Coordinador del Plan Provincial del Manejo del Fuego, destacó que este fuego se “originó aparentemente por el caído de un tendido eléctrico” e indicó que tiene “una afectación al momento de entre 1.800 y 2.000 mil hectáreas”.
En tanto, el Ministerio de Salud informó a la población de Mendoza sobre situación actual relacionada con el Zonda y los incendios, y su impacto en la salud respiratoria. “Se ha detectado concentración de humo ambiental, lo cual puede ocasionar inconvenientes a la población en general, y en particular para aquellos con enfermedades respiratorias previas”, detallaron esta tarde e instaron a “todos los ciudadanos a tomar medidas preventivas para proteger su salud”.
Además, solo hasta la 7 de este domingo, Defensa Civil ya había informado más de 500 intervenciones en distintos departamentos de la provincia por caída de árboles, postes y voladuras de techo, incendios, entre otros daños.
Ante las numerosas denuncias, llamadas y reclamos, la Ciudad de Mendoza desplegó un operativo con todos sus equipos a disposición, el cual se intensificó durante la madrugada.
“En los últimos diez años ha habido zondas fuertes, pero las características de este en particular son la intensidad, la durabilidad en el tiempo y el promedio de las velocidades del viento. Por ello se ubica entre los más fuertes de la última década”, destacaron desde su delegación de Defensa Civil.
El Centro de Contactos ha atendido más de 300 llamados y desde las áreas técnicas se han registrado más de 200 sucesos entre árboles y ramas caídas, chapas y techos con roturas o voladuras, cables cortados y postes caídos, entre otros, informó esta tarde el municipio capitalino, mientras que situaciones similares se registraban en otras comunas de la provincia.
Por su parte, la Empresa distribuidora de electricidad de Mendoza (Edemsa) “continúa trabajando para normalizar afectaciones generadas por el viento Zonda” en los distintos departamentos.
El sábado, el viento comenzó a sentirse en el Gran Mendoza pasadas las 15 y se fue intensificando con el correr de las horas, mientras que más temprano afectó al sur provincial y localidades del Valle de Uco.
El Servicio Meteorológico Nacional volvió a emitir este domingo un alerta amarillo y otro naranja para distintas zonas de Mendoza, entre otras provincias, por viento Zonda.
Por otra parte, autoridades cerraron el paso internacional Cristo Redentor la medianoche del sábado, ante el ingreso de un temporal de nieve y viento en alta montaña que impide la transitabilidad.
La medida llegó en un fin de semana donde miles de turistas chilenos decidieron viajar aprovechando un feriado en su país y ya cruzaron a la capital de Mendoza.
> Con información de TÉLAM.
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