Soy cordobés hasta la médula y se va otro año con un montón de fracasos en el deporte de Córdoba. Incluso, Federico Elías, un jugador de baloncesto de Instituto, quedó involucrado en un accidente vial en la ciudad de Córdoba, donde una joven perdió una pierna. Todo es una locura.
El fútbol vivió un 2021 terrible:
-Racing de Nueva Italia perdió la final y no pudo ascender ante Brown de Puerto Madrin. Si le pregunto a cualquier hincha de fútbol, no sabe ni los colores de la camiseta del conjunto patagónico.
-Instituto fue un fracaso total. Cambios de técnico y un montón de directivos peleados. Hubo renuncias y queda como presidente el dirigente que manejó siempre el basquetbol.
-Belgrano afuera de un posible ascenso cuando Luis Artime prometió en campaña para subir a primera división. Todo un verso, como siempre fue Artime. Increíble que el hincha Celeste le crea a este dirigente. No sé puede prometer algo que no se puede cumplir.
-Le paso también al cacique Alexander Medina, que quería ser campeón con Talleres y no fue. Tuvo posibilidades en Primera División y Copa Argentina. Otra promesa incumplida. Medina no arriesgó contra River y Boca, ambos quedaron con 10 hombres. Nunca mandó al equipo al frente para ganar. Gimnasia le hizo 5 goles y con Lanus ganaba por 3 goles y casi lo pierde. Talleres solo logró el pasaporte a Libertadores. Cuando tenía todo para que los cordobeses pudiéramos ver una vuelta olimpica.
Para mí, el fútbol cordobés fue un fracaso. Pienso, que quizá me muera sin poder ver un club cordobés campeón. Por supuesto, eso me da mucha bronca.
Miremos a Santa Fe, con cuatro equipos en primera división, más Patronato (de Paraná) cruzando el túnel subfluvial. Córdoba que habla de Estudiantes de Río Cuarto y dice que está lejos de la capital, pero que también fracasó cuando tenía todo para ascender.
El fútbol cordobés fue otra vez un fracaso aunque algunos quieran esconder la basura debajo de la alfombra.
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