Finalmente tomaron el café y se pusieron de acuerdo. Sergio Massa cerró ayer, en las oficinas de Alberto Fernández, el acuerdo político con el peronismo y el kirchnerismo, luego de extensas negociaciones entre ambos espacios, aunque resta definir si habrá o no primarias entre ambos por la fórmula presidencial. El espacio fue bautizado “Frente de Todos”.
El acuerdo básico consiste en un programa de gobierno y en la conformación de una coalición de partidos, integrada tanto por Unidad Ciudadana como por el Frente Renovador. En tanto, la próxima semana acordarán si las candidaturas se definen a través de una PASO o si se llega a un acuerdo de consenso.
La disputa que demora el acuerdo total, pasa por los lugares en las listas y por si hab´ra o no Primarias por la candidatura presidencial. La idea que se debate es tener hacia abajo una boleta compartida, lo cual implica una división de lugares entre los espacios de ambos para las listas de diputados nacionales, legisladores provinciales e intendentes. Sobre todo, en la provincia de Buenos Aires. También se estira el acuerdo a un eventual gobierno, tanto en Buenos Aires como en el país.
La negociación con el tigrense no es fácil. Según fuentes kirchneristas, cada vez les pide más. Sin embargo, hay un lugar donde la situación es más compleja: Tigre. Massa pidió que no haya internas y que la candidata a intendente del municipio sea Malenaa Galmarini, su mujer. Los Massa-Galmarini quieren recuperar su histórico bastión, hoy en manos de un ex delfín, Julio Zamora. El actual intendente se mudó hace varios meses al PJ, por eso, ahora, el lider del Frente Renovador no quiere saber nada con una PASO, pero Zamora resiste.
Como la provincia de Buenos Aires es un mundo aparte, la situación de Tigre se repite en numerosos municipios.
En declaraciones a la prensa, Massa calificó la reunión que mantuvo con Fernández como “fructífera” e informó que se avanzó en un “acuerdo de 12 puntos” para formar “el próximo gobierno a partir de 10 de diciembre”.
“La situación social, nos obliga a trabajar juntos, con todos, a poner lo mejor de nosotros para devolverle la esperanza a millones de argentinos. Tenemos el desafío de construir una gran coalición opositora. Una amplia mayoría que ponga de pie a la Argentina”, afirmó.
Otro dato del acuerdo, es que fuerza política conservará su identidad, por lo que se trata de una coalición de partidos: el Partido Justicialista, Unidad Ciudadana, y el Frente Renovador.
Gracias @Bordet por tu apoyo y por todo lo que estás haciendo para que la esperanza siga creciendo.
Entre todos vamos a salir adelante. pic.twitter.com/mD1XSNwLXE
— Alberto Fernández (@alferdez) June 12, 2019