Los dos amenazas que recibió la Policía de San Francisco el lunes, en las últimas horas de la tarde, habrían salido de una misma zona de la provincia de Santa Fe y fueron tomadas por personal policial desde dos aparatos de la central operativa que no tienen identificador de llamadas. Así trascendió este miércoles de una fuente con conocimiento de la investigación.
Cabe acotar que la mayoría de los teléfonos de esta central carecen de esa opción, lo que dificulta la tarea cotidiana de los operadores.
El hecho de que no se pudiera identificar el número demoró el rastreo del origen de la llamada, pero no lo imposibilitó ya que obviamente existen otros medios para averiguarlo. También se sabe que los autores fueron dos hombres distintos. La investigación estaría trabajando sobre distintas hipótesis, pero se estima que las amenazas provinieron de la vecina Santa Fe, sacudida por el accionar de las bandas de narcotraficantes. También aparece la posibilidad de que la motivación de las amenazas sea otro capítulo de la disputa territorial y operativa entre el Clan Gallardo y la banda de “Los Monos”.
Uno de los llamados señalaba que la banda narco “Los Monos” había llegado a la ciudad, y el otro advertía que había una bomba en la jefatura y que iban a matar a todos los policías. Por esa amenaza debió intervenir la Brigada de Explosivos, con el fin de determinar si había o no un explosivo en el edificio. Finalmente se comprobó que era una falsa alarma. El caso, por estar ligado al narcotráfico, es un delito federal y es investigado ahora por la fiscal federal subrogante María Marta Schianni.
San Francisco, en el Este provincial, es una zona caliente del tráfico de drogas, tanto por su cercanía con Frontera y Josefina, dos localidades ubicada del otro lado de la línea que delimita a las dos provincias, como por su propia ubicación geográfica, como cabecera de una región con rutas que la conectan, tanto con las provincias del Norte, como con el territorio santafesino.
“HEMOS DETECTADO 52 PUNTOS DE INGRESO DE DROGA ENTRE SANTA FE Y CÓRDOBA”
El ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, reveló este miércoles en San Francisco que “tenemos 52 puntos detectados de ingreso de droga entre Santa Fe y Córdoba”. El funcionario llegó a esta ciudad del este provincial para poner en funciones al nuevo jefe de la Departamental, Rubén Alejandro Caporali.
Los movimientos se producen en el marco de la escalada de violencia de las narcobandas rosarinas que mataron a dos taxistas, un colectivero y un playero de estación de servicios en la última semana, como represalia a los controles de seguridad a los jefes y manos medios de esos grupos que están detenidos en los penales de Santa Fe.
En San Francisco, Quinteros resaltó la importancia del refuerzo en materia de seguridad que se llevó a cabo en la departamental San Justo de Policía, sobre todo porque considera a esta ciudad como “un punto neurálgico” al que como autoridades provinciales “hay que prestarle mucha atención. Ya hemos reforzado con controles de nuestra Policía Caminera y Patrullas Rurales. No vamos a permitir que se altere la paz social en Córdoba”.
Agregó que “no nos podemos hacer los distraídos con lo que está pasando. La situación en Rosario desbordó y venimos de entrevistarnos con el ministro de Seguridad de la provincia de Santa Fe para tener una política articulada con esa provincia y en este caso San Francisco es un punto neurálgico al que hay que prestarle mucha atención”.
El ministro señaló respecto de las amenazas recibidas el pasado lunes en la sede de la Policía de San Francisco que están siendo investigadas por la Justicia Federal y confió en que “de dicha investigación seguramente saldrá quiénes fueron los autores”.
También expresó que “mientras tanto hemos decididos adoptar acciones concretas y por eso estamos acá, reforzando Patrulla Rural, Policía Caminera, el Seom (Servicio Especial de Operaciones Motorizadas), Infantería y asignar más efectivos como una muestra de nuestra preocupación por esta situación”.
Por último, Quinteros agregó que “hemos solicitado la llegada de personal de Gendarmería que estaría arribando a San Francisco la semana próxima para que controlen los más de 52 puntos de contacto en la frontera entre Santa Fe y Córdoba”.
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