El Consejo de Médicos de la Provincia de Córdoba realizó este lunes el primer debate entre referentes de salud de los distintos espacios políticos que participarán en las próximas elecciones provinciales. El encuentro forma parte del ciclo “Pensando la salud de Córdoba” e intervinieron miembros de cuatro fuerzas políticas de la oposición, junto a la ministra de Salud de la Provincia, Gabriela Barbás; y la secretaria de Prevención y Atención en Salud Comunitaria de la Municipalidad de Córdoba, Liliana Montero.
El presidente del Consejo de Médicos (CMPC), Héctor Rolando Oviedo, dijo al inicio dela actividad que “hace pocos meses, cuando asumimos la conducción con los miembros de Junta Directiva que me acompañan, nos planteamos generar una institución propositiva; no quedarnos en la catarsis ni en el análisis, sino generar propuestas que nos permitan avanzar en la salud”.
Agregó que “seguramente, si preguntamos a la mayoría de la población, muchos expresarán que les preocupa la seguridad, la economía y la educación. La salud siempre queda relegada; pero sin salud, ninguna de esas otras cosas es posible”, añadió.
Los planteos de las distintas fuerzas políticas fueron los siguientes:
HACEMOS POR CÓRDOBA
Expusieron Liliana Montero, secretaria de Prevención y Atención en Salud Comunitaria de la Municipalidad de Córdoba, y Gabriela Barbás, ministra de Salud de la Provincia.
Montero destacó las acciones realizadas en los centros de atención primaria de la Municipalidad de Córdoba. “El sistema de atención primaria de la ciudad de Córdoba es el más grande de América Latina. Donde no hay nada, hay un centro de salud”, ilustró. Precisó que los 100 centros de salud concentran la mayor dotación de recursos humanos de la Municipalidad de Córdoba.
Describió que los ejes de gestión de la Secretaría son infraestructura, insumos, recursos humanos, modernización y líneas de acción sanitaria. Respecto de la infraestructura, apuntó que se puso en marcha el Programa Repara Salud. Enfatizó que se trata de uno de los programas “emblema” de la gestión, ya que se reformaron y mejoraron 12 centros de salud, hay 17 en obra y 10 que se ponen en marcha esta semana. “Los arreglos de la salud comunitaria los hicieron 300 trabajadores y trabajadoras de la economía social”, detalló.
Finalmente, mencionó algunos de los programas en los que trabaja la Municipalidad: resguardo y acompañamiento de las personas gestantes, con una mejora del registro y la estadística; y el desarrollo del sistema de receta electrónica en conjunto con el Consejo de Médicos y el Colegio de Farmacéuticos, que se analizó a través de una prueba piloto sobre psicofármacos en el primer trimestre del año.
Por su parte, la ministra Barbás, destacó que “la accesibilidad es lo que día a día venimos trabajando para poder llegar no solo con el equipo médico, sino con el equipo de salud ampliado en el que la comunidad forma parte de los cuidados que debemos abordar”. Indicó que hay una articulación con los diferentes actores y sectores vinculados al sistema de salud y alianzas estratégicas.
Respecto de los recursos humanos, informó que este año se abrieron diez vacantes para Anestesiología y 56 para Pediatría. “Más de 860 postulantes se presentaron para las residencias en nuestra provincia”, puntualizó.
Aseguró que fueron múltiples los avances en materia de salud y que ahora toca “construir sobre lo construido. Es muy fácil pensar que se tiene que empezar de cero cuando hay tantas cosas que nuestro equipo de salud desde hace tantos años viene construyendo día a día”.
“Córdoba es la única provincia en la que hoy se está pagando por desempeño en municipios. El control de las enfermedades crónicas no transmisibles, por ejemplo, se mide semanalmente para poder saber a qué población llegar y qué cobertura dar. A partir de esas metas es que se tracciona el sistema a través de pago por desempeño”, explicó. Además, dijo que es la única provincia en la que en la mesa de residencias están sentados “todos los sectores y subsectores público y privado y las universidades”.
Por último, recordó la inversión en infraestructura con la construcción de nuevos hospitales, en capital e interior.
JUNTOS POR EL CAMBIO
Juan Pablo Peirone (Juntos por el Cambio) expresó que es necesario plantear una política sanitaria de Estado “que sea a largo plazo. Cambian los gobiernos y el que aparece revé lo anterior, lo modifica y, así, paso a paso, nos lleva a la situación actual, con un modelo agotado que necesita de mucha prudencia, de mucha mesura y, fundamentalmente, de mucha capacidad para poder revisarlo”.
Manifestó que en el paradigma de su espacio político es “la salud es una sola”, es decir, no se divide en “pública o privada”. “Tenemos que fortalecer una red asistencial donde esté claro el nivel de complejidad. Los niveles de atención son fundamentales. Tenemos que saber hasta dónde llega un primer nivel, hasta dónde un segundo nivel y cuándo tenemos que tercerizar la atención”, explicó.
Propuso también mejorar y reducir los plazos de pago de los honorarios médicos de la obra social provincial Apross, reforzar la Prevención y Promoción de la Salud y extender los hospitales escuela, a través de una mejor articulación con las universidades.
IZQUIERDA SOCIALISTA (FIT)
En tanto, Medardo Ávila Vázquez señaló que los tres principios de análisis con el que su espacio político aborda el tema son: la salud como derecho humano; la enfermedad determinada social, política y ambientalmente y los cuidados, que generalmente son asumidos por las mujeres dentro de las familias, lo que hace necesario que el Estado asuma esta tarea y la valorice.
En tanto, enumeró como amenazas a la salud la pobreza y marginalidad; la crisis hídrica, la exposición a los agrotóxicos y el cambio climático; la respuesta estatal al consumo y tráfico de drogas y la violencia machista patriarcal.
Además, manifestó que el sistema de salud está fragmentado entre aquél que está destinado a quienes pueden pagarlo y otros para los que no pueden abonar, y propuso, entre otras cosas, avanzar hacia un sistema de salud único, gratuito, universal y de calidad, “duplicando presupuesto, respetando trabajadores y multiplicando su número”.
También dijo que “es preciso recuperar fondos de subsidios a empresas y pagos de la deuda externa, desarrollar un área de producción pública de medicamentos, ejecutar medidas de reducción de daños por el consumo de drogas (y legalizar el consumo) y enfrentar la crisis del cambio climático”.
MST (FIT)
A su turno, Raúl Gómez manifestó que el concepto de salud del MST es el de derecho, el cual –dijo– se enfrenta a quienes lo consideran “como una mercancía”. Sostuvo que la propuesta del sector es un sistema de salud unificado y articulado en todo el país, ordenado desde la atención primaria de la salud, como propugna –aseveró– la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Lamentó que los trabajadores de la salud “estén precarizados. (…) Asistimos a una constante desjerarquización”, subrayó. “Sin trabajadores de la salud, no hay salud. El punto de partida es la jerarquización”, sostuvo. Finalmente, dijo que debe garantizarse el acceso a servicios básicos, como el agua, y aseguró que la población está expuesta a situaciones que la afectan, como las fumigaciones. “Cuidar la salud es priorizar la vida de las personas”, concluyó.
ENCUENTRO VECINAL
Por último, Ricardo Condori expresó que “si seguimos subordinándonos al imperio de la economía social de mercado estaremos afectando a más médicos”.
“Nosotros no nos oponemos al progreso, no nos oponemos ni a la robótica ni a la inteligencia artificial. Nosotros nos ponemos del lado de las personas, por eso creo que lo primero que tenemos que discutir es la creación de un colegio médico que pueda regular los salarios”, agregó.
Condori informó que una de las iniciativas pensadas por Encuentro Vecinal es la conformación de un comité ético y de investigación para apoyar a los investigadores para que puedan realizar nuevos descubrimientos, pero también para poner límites a farmacéuticas y a algunos desarrollos que puedan efectuarse.
Además, señaló que se pueden hacer mejores convenios con la obra social provincial Apross que harían más sustentables a sanatorios y clínicas del interior.