Una marcha de empleados de Petroquímica Río Tercero SA y vecinos de la ciudad, protestó este jueves contra el despido de 124 operarios de la planta industrial. Un cartel con la leyenda “Sin industrias no hay Río Tercero” encabezó la protesta, que contó con el apoyo, entre otros, de la diputada nacional Gabriela Estévez (Unión por la Patria) y el legislador provincial, Dante Rossi (UCR), de distintos sindicatos y del Foro Solidario Córdoba.
Si bien esta tanda de despidos corresponde a la empresa Transclor, una de las divisiones de PR3, la situación es producto del cierre de la planta productora de TDI, que representaba el 80% de la facturación del Grupo León Forte, propietario de PR3 y uno de los principales fabricantes de colchones en el país. La planta de TDI abastecía justamente la producción de colchones y tenía como cliente adicional a las autopartistas que elaboran asientos para la industria automovilística. La caída de esta industria, la única en América Latina, en octubre del año pasado, sería una consecuencia de la decisión del grupo de importar el TDI desde China. En ese marco, la misma empresa solicitó el levantamiento de la protección antidumping que gozaba desde 2002, medida que fue dispuesta por el gobierno nacional en abril de este año. La información fue dada a conocer por el Sindicato de Trabajadores de Industrias Químicas y Petroquímicas a partir de un informe elaborado por el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos de la Argentina (CeProDH).
Si bien las cesantías no se instrumentaron aún por el dictado de conciliación obligatoria por 15 días, una medida dispuesta por la Secretaría de Trabajo de la Provincia, la falta de avances en la negociación entre la compañía y el gremios, preanuncia la posibilidad de que finalmente se concreten. El gremio inició un plan de lucha apenas la empresa dispuso los despidos, pero la acción sindical se encuentra interrumpida ahora por la conciliación.
PR3 busca que se dicte el Procedimiento Preventivo de Crisis para despedir con un pago menor de indemnizaciones y afirma que la decisión forma parte de un intento de reestructuración por problemas económicos. En octubre pasado, la empresa decidió el cierre de su unidad de producción de TDI, que representaba cerca del 80% de su facturación. La empresa tenía al inicio de la reestructuración hace nueve meses 375 empleados y procura reducir su plantel a 130 empleados.
Cabe recordar que el lunes, la compañía emitió un comunicado donde afirma que “debido a la situación económico financiera de la compañía, se ve en la necesidad de realizar una profunda transformación de la empresa, que incluye en esta etapa la desvinculación de 124 colaboradores, quienes venían desempeñando sus tareas tanto en el complejo industrial de Río Tercero como en las oficinas de Buenos Aires. La delicada situación de la compañía obliga a una racionalización de la dotación para encarar una nueva etapa bajo condiciones que permitan la continuidad operativa”.
La Municipalidad de Río Tercero manifestó en un comunicado “su profunda preocupación por los 124 despidos ocurridos en la empresa Petroquímica, que afectan directamente a trabajadores y sus familias. Frente a esta situación, manifestamos nuestra solidaridad con quienes atraviesan este difícil momento y advertimos sobre el fuerte impacto social y económico que esta medida genera en toda la comunidad. Desde el municipio estamos llevando adelante todas las gestiones necesarias ante los distintos organismos competentes y también ante los directivos de la empresa, con el objetivo de obtener información clara sobre el futuro de la planta y de defender los puestos de trabajo que hoy se encuentran en riesgo. Nos hemos puesto a disposición de los trabajadores y seguimos de cerca el desarrollo del conflicto laboral, exigiendo respuestas, diálogo y una salida responsable que priorice el cuidado del empleo y el desarrollo productivo de nuestra ciudad”.
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