Lo aseguró la presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), María Marta Cáceres de Bollati, en la apertura de las Primeras Jornadas Federales sobre Violencia Familiar que se realizan en Córdoba.
Cáceres de Bollati expresó que este encuentro responde a la necesidad de “articular y coordinar” esfuerzos interinstitucionales e interdisciplinarios con el fin de cumplir los compromisos internacionales asumidos por el Estado argentino en materia de violencia doméstica. “Si hay una problemática de la que no podemos desentendernos y mirar hacia otro lado, sino que demanda nuestro activo compromiso social, es esta”, enfatizó.
La magistrada remarcó que la violencia, en cualquiera de sus manifestaciones (física, económica o psicológica), es el fruto de estereotipos largamente sedimentados que condenan a la mujer “a un rol social secundario y pasivo; a ser un objeto o instrumento de la voluntad de otro”.
Agregó que esto tiene graves consecuencias para los otros miembros del núcleo familiar (en particular si son niños), que “peligrosamente pueden acostumbrarse a esto y a reproducir luego, en sus propias relaciones, lo que van vivenciado casi como si fuera normal”.
“Eso es lo que debemos contribuir a desmantelar. Por eso, el sentido de estas jornadas es el de intercambiar información, estrategias, experiencias o iniciativas que proyectamos implementar o que ya hemos implementado en nuestras respectivas provincias”, indicó.
La titular del TSJ de Córdoba exhortó a los operadores judiciales y extrajudiciales presentes a “generar conciencia social acerca de que solo si producimos las condiciones sociales adecuadas podremos aislar a la violencia como una anomalía inadmisible, violatoria de derechos fundamentales y, sobre todo, de esa textura moral que no equipara a todos como seres humanos absolutamente iguales”.
HERRAMIENTAS
Las jornadas federales fueron organizadas por el TSJ de Córdoba a través de la Oficina de Coordinación de Violencia Familiar (OVF). Su coordinadora, la secretaria del TSJ Agustina Olmedo, enfatizó durante la apertura que, desde 2015, la oficina ha procurado optimizar el servicio de justicia a través de la gestión de mejoras concretas que brinden mayor calidad a la respuesta judicial en el marco de los hechos de violencia cometidos en el ámbito familiar.
Explicó que la OVF ha implementado diversas acciones de manera conjunta con los distintos Poderes del Estado. En este marco, recordó que se dictaron más de 40 acuerdos reglamentarios, elaborados con operadores del Poder Judicial de Córdoba y con órganos extra poder, que contienen protocolos de actuación y pautas de actuación en la materia.
Olmedo subrayó que el objetivo de las jornadas es abordar el flagelo de la violencia doméstica desde una perspectiva interdisciplinaria e interinstitucional para que, tanto los operadores judiciales como los representantes de otros poderes, “puedan contar con las herramientas necesarias para trabajar de una manera más eficiente en contra de este flagelo social e instar los cambios necesarios en las instituciones y lugares de trabajo”.