Desde hoy, después de pensarlo bastante, he decidido sumarme al staff de Enredacción. Mi nombre no es Casandra y mi apellido no es James, pero como trabajo en otro medio, no puedo escribir con el mío. Quiero que lo sepan de entrada, para que después no se quejen. Tampoco estoy viviendo en Argentina, porque vía Ezeiza y con una valija de color rojo y una bufanda al tono, me fui a fines de los ’90. Les confieso que no los extraño, porque me acostumbré a viajar por el mundo y a que el transporte urbano funcione como un reloj suizo. Es la única pista que les voy a dar: mi residencia habitual está en un país europeo.
El wasapp que recibí hace un par de horas, decía: – Casandra, ¿viste lo que dijo Alberto Fernández de Guillermo Moreno?
Yo le contesté enseguida: – ¿Y vos viste lo que había dicho ese “troglodita” de Fernández?
– ¿??
– ¿Querés que te cuente? Eso sí, dejame que la sume a Lilita, a la que en algún momento Mauricio le va a cerrar la puerta de Olivos. Como García tiene el sí más rápido del mundo, obviamente me metí en el tema.
Primero lo primero: “Lo último que haría sería copiar algo de Guillermo Moreno” sacudió hoy Alberto Fernández, el candidato de Cristina Fernández de Kirchner, en el MALBA, donde lo había invitado nada menos que el enemigo número 1 de Moreno, que fue secretario de Comercio Interior desde 2006 a 2013: el Grupo Clarín. Si hasta hizo hacer un cotillón cuando viajó a Angola que decía: “Clarín miente”.
Encima, Alberto eligió el escenario que le brindó Héctor Magnetto, el diablo para el kirchnerismo, para tirar por la borda a Moreno. Con el ex secretario nadando en el mar, está diciéndole a quien quiera oírlo, que no piensa alterar cifras desde el INDEC, que no se va a pelear con Clarín y que si gana en octubre, requiere “blindaje mediático”.
Para que Alberto diga esto donde lo dijo, aparte del cálculo, hay que traer a colación lo siguiente: En un reciente reportaje que le hicieron, Guillermito, le tiró estas flores de cemento a Alberto. Van algunas:
-“Pretendo ir a internas, soy afiliado del Partido Justicialista, no como Alberto que creo tiene su partido propio todavía.”
-“No sé por qué Cristina tomó esta decisión. Hace tantos años estoy casado y me sorprenden las decisiones que se toman en casa, imagínate que es imposible saberlo.”
-“La realidad es que es una fórmula que está complicada porque no conquista la pasión que necesita de parte del pueblo peronista para ganar.”
-“¿En qué se diferenció Alberto Fernández del macrismo? Capaz que con otro collar. Vamos llegando al fondo de los reportajes y lo que me terminan diciendo siempre es ‘Moreno vos tenés razón’.”
-“¿No será que Alberto quiere continuar con lo que hace Macri y por eso no hace definiciones? ¿Por eso mandó a sus economistas a Wall Street?”
-“Todos nos equivocamos, ¿y si Cristina se equivocó esta vez? ¿Y si eligió mal? ¿Y si eligió a alguien que en realidad no quiere cambiar? ¿Qué hacemos con el peronismo? ¿Para qué queremos un gobierno que no cambia lo que hizo el macrismo?”
Dejó tela para que se caliente hasta el Papa Francisco. ¿No?
Si alguno de los que leen no se acuerda de otras grandes definiciones argentinas de Guillermito, acá les pongo algunas que dijo mientras fue funcionario (no quiero que digan que la nota no está documentada como corresponde, porque allá está lleno de “contreras”):
– “Acá no se vota nada. Las mujeres para atrás y demos la pelea que hay que dar”. En la asamblea de la empresa Papel Prensa S.A. que fue suspendida luego de que Moreno sacara unos guantes de boxeo en medio de la reunión e invitara a pelear a los presentes.
– “Esto se resuelve como hombres”, dijo también en esa reunión de Papel Prensa S.A.
– “Que se metan la cacerola en el orto”. En medio de un cacerolazo, Moreno encabezaba un acto de la CGT en Olivos y se expresó de ese modo frente a militantes kirchneristas.
– “Cuando a la gente el salario le alcanza sólo para comer se la aguanta, pero está triste, ese es el gobierno de Menem. Cuando no alcanza ni para comer rompe todo, es el gobierno de la Alianza. Y cuando a la gente le sobra un mango, está feliz, ese es nuestro gobierno”. Esta reflexión fue hecha en un encuentro junto al ex vicegobernador de Buenos Aires, Gabriel Mariotto, en el Centro Cultural Padre Mugica.
– “Si ponemos el precio de los alimentos básicos a un precio razonable en términos de salario medio de la economía, nos aparece del otro lado el dueño de los alimentos, que sigue siendo esa raza que Evita definió muy bien, que es la puta oligarquía”, sostuvo en el mismo encuentro con Mariotto.
– “Conseguimos que la oligarquía tenga que declarar la producción de trigo y de maíz. Es la primera vez que el Estado tiene cuenta por cuenta, hectárea por hectárea, cuánto maíz y trigo se produjo y quién es el dueño”. Le dedicó este párrafo al sector rural en el mismo acto.
– “¿De qué inflación me están hablando si el precio de la carne no sube hace tres años?” En una entrevista Moreno dijo que el precio de la carne no subía desde hacía tres años y defendió los precios del INDEC.
– “Por favor, la retirás a la señora de la reunión, porque no se ajusta a la metodología. Y si alguien más considera que se tiene que retirar de la reunión, no hay ningún inconveniente”. Con estas palabras Moreno expulsaba del encuentro con asociaciones de consumidores a Sandra González, directora de la Asociación de Defensa de los Consumidores y Usuarios de la Argentina (Adecua).
…
Ahora, sería sumamente injusto poner el punto final en la oración anterior. Desde hace mucho tiempo vive y habla entre ustedes Elisa “Lilita” Carrió. Lilita.
Desde esta semana es la vocera del presidente Macri. Por lo menos eso salió diciendo después de una reunión que se hizo en Olivos y donde la foto que vi, es tan triste como la derrota que sufrió el gobierno el domingo 11 de agosto. No había una sola sonrisa. En realidad sí; había una: la de Lilita.
Todo el mundo me pregunta desde hace meses cómo es que el presidente de ustedes (por Macri), porque obviamente saben que soy argentina, no se sacó de encima a esa tal Lilita.
“Ustedes se buscan lo que les pasa”, suele decirme mi compañera del escritorio de enfrente cada vez que me escucha decir: “cómo puede ser tan tarada esta mina”. Y algo de razón tiene, pero está de más que les diga, que le llevo la contra.
Pero se los cuento a ustedes: algo de razón tiene. Lilita es a Mauricio, lo que Guillermito fue a Cristina y Néstor.
La primera de todas es la que dijo en Córdoba tratando de ayudar a Mario Negri, uno de los candidatos a gobernador, hace unos meses nomás: “Gracias a Dios murió De la Sota, porque ahí sabrían qué es una denunciadora”.
O esos tremendos 23 minutos sobre el escenario del Centro Cultural Kirchner, la semana pasada. Miré el video tres veces. No lo podía creer.
De entrada, los miró y les dijo: “Yo voy a decir lo que yo quiera, ¿está claro?”. Y qué le iban a llevar la contra. Si los ojos le saltaban.
– “Al Presidente le digo que no se mueva de donde está. No hay que enfrentar las tormentas con los lobbys que piden cambios todos los días. A nosotros no nos van a sacar de Olivos los que nos quieren mover; nos van a sacar muertos”.
– “Yo no es que estoy enojada, yo simplemente les digo, al pueblo argentino, que no vote ladrones, porque lo van a robar”.
– “Dios escribe derecho por caminos torcidos. Yo le dije a Marcos (Peña) pero a mí no me creen. Yo soy la peor de todas, con Marquitos nosotros nos llevamos bárbaro. Yo ya le dije a Marquitos: ‘Marcos Peña es un mártir, muchacho, acostumbrate’, y él entendió. Y todos tenemos que sostener a Marcos, porque le pegan a Marcos para pegarle a Mauricio”. (Aclaro, Marcos Peña es el alter ego de Macri y el contacto con el gurú de Ecuador Jaime Durán Barba. Es el que maneja las redes sociales milagrosas hasta esta elección del presidente).
– “Y van a cambiar los votos. Hay mucha gente que está esquiando. ¿Entendieron? Amigos nuestros… El verano europeo es divino, y se está jugando el futuro de la Argentina”.
-“A mí no me asustan ustedes, muchachos, los PJ. Menos Alberto Fernández, que es tan ordinario, pobre. Ya una vez me dijeron que me aniquilaban y no pudieron”.
– “Miren, al vicepresidente (Miguel Ángel) Pichetto yo lo conozco de hace 25 años. Está bastante bien conservado, yo lo veo… Era presidente de Justicia y yo vicepresidente. Estábamos en las antípodas, porque si hay dos personas distintas, esos somos Pichetto y yo. Yo era amiga del “Gringo” Soria, que decía: ‘Mi mujer me va a matar’, y lo mató”.
En fin, Macri, algún día, va a hacer con Lilita lo mismo que hizo Alberto con Moreno. Eso sí, no sé qué querrá demostrar cuando lo haga. Capaz que elige la sede de la UOM para decirlo, debajo de un cuadro de Lorenzo Miguel. Pero para ser justos, me conformo con que el día que le diga “Chau”, le recrimine haberse comparado con la “genia” de Tita Merello: “Soy una gran actriz de la escena nacional, como Tita Merello”, supo decir Carrió. Pobre Tita.