El Producto Bruto Interno (PBI) se contrajo 5,8% interanual en el primer trimestre del año y acumuló cuatro trimestres en baja, informó el INDEC.
Además, se profundizó la recesión respecto del último trimestre del 2018, año que cerró con una caída del 2,5%.
En comparación, el primer trimestre de 2018 había tenido una caída del 6,1% respecto de igual trimestre de 2017, por lo cual el 5,8% marca suave una desaceleración del derrumbe.
En términos desestacionalizados, este primer trimestre la caída fue de 0,2% respecto del trimestre previo, pero del 2% con estacionalidad, “mientras que la tendencia ciclo muestra una variación positiva de 0,1%”, rescató el Indec.
El PBI representa la totalidad de los bienes y servicios producidos en la economía durante el período relevado. Al desglosar los motivos de la contracción de la economía entre enero y marzo, lo que se observa es un fuerte ajuste del consumo del sector privado -no así del sector público- y en particular de la formación bruta de capital, es decir, de la inversión real que se contrajo 24,6% en la comparación con los primeros tres meses de 2018.
“Esta caída se debió al decrecimiento de 9,9% de la inversión en construcciones, a la baja de 4,1% de otras construcciones, a la disminución de 31,5% en maquinaria y equipo y al decrecimiento de 56,1% en equipo de transporte. Dentro de maquinaria y equipo, el componente nacional de-creció un 37,5% y el componente importado, un 28,5%. En equipo de transporte el componente nacional se retrotrajo 54,6% y el importado decreció 57,8%”, detalló el Indec.
A su vez, explica el INDEC que “la evolución macroeconómica del primer trimestre de 2019 determinó, de acuerdo con las estimaciones preliminares, una variación en la oferta global, medida a precios del año 2004, de -10,3% con respecto al mismo período del año anterior, debido a la caída de 5,8% del PIB y de 24,6% en las importaciones de bienes y servicios reales”.
De los 16 sectores en los que el Indec clasifica las ramas de actividad, en 11 registró caídas. Solo se registraron alzas en agricultura (7,7%), pesca (5,5%), enseñanza (1,1%), servicios sociales y de salud (0,1%) y hogares privados con servicio doméstico (8,9%).
Por el contrario, las mayores contracciones se observaron en comercio mayorista y minorista y reparaciones (-12,6%), industria manufacturera (-10,8%), intermediación financiera (-10,3%), construcción (-6,8%), y en transporte, almacenamiento y comunicación (-4%).