El directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó un nuevo desembolso de u$s2.000 millones para Argentina tras la primera revisión del programa económico, destacando avances en la gestión del gobierno de Javier Milei, pero advirtiendo sobre la necesidad de profundizar reformas, mantener la flexibilidad del dólar y acelerar la acumulación de reservas.
En un comunicado, el FMI subrayó que “persisten riesgos altos” y enfatizó la importancia de una “toma de decisiones ágil, comunicación clara y asistencia social bien focalizada” para sostener el consenso político y social.
“Preservar la flexibilidad cambiaria y reconstruir reservas es fundamental para gestionar shocks y acceder a mercados internacionales en mejores condiciones”, señaló el organismo.
El FMI observó que Argentina no alcanzó la meta de acumulación de reservas para junio, aunque reconoció el cumplimiento de otros criterios clave y la implementación de medidas correctivas. Además, instó al gobierno a avanzar en reformas estructurales, como la desregulación de la economía, la reducción de barreras de entrada, y mejoras en la gobernanza y eficiencia del Estado.
Entre las recomendaciones, el organismo destacó la necesidad de fortalecer el mercado laboral para fomentar el empleo formal, atraer inversión extranjera con un régimen de incentivos equitativo y reducir impuestos distorsivos a las exportaciones cuando las condiciones fiscales lo permitan.
El FMI también elogió las “políticas adecuadamente restrictivas” del gobierno y su transición hacia un régimen cambiario más flexible, que ha contribuido a una inflación en descenso y un crecimiento económico continuo. Sin embargo, insistió en que la sostenibilidad del programa dependerá de la capacidad de profundizar estas medidas y mantener la agilidad en su ejecución.
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