La Unión Tranviarios Automotor (UTA) inició desde las cero horas de este viernes 12, un paro de actividades en los servicios de colectivos de todo el país, menos los de la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires. Esto implica que tampoco circularán los ómnibus de la capital cordobesa. La medida de fuerza se realiza en demanda de mejoras salariales.
El gremio reclama un aumento del 20% para los meses de mayo, junio y julio y un bono de 16.000 pesos en tres cuotas, ocho mil pesos por cobrar el 20 de julio; cuatro mil pesos, el 4 de agosto, y cuatro mil pesos en septiembre. El acuerdo es por tres meses. “Es lo mismo que se acordó con los choferes de AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires)”, indicó la UTA.
“Nada ha cambiado desde la semana pasada, por lo que el paro se realizará” dijo el jueves a la mañana, a Radio Nacional Córdoba, Jorge Kiener, secretario de Interior de la Unión Tranviarios Automotores (UTA).
“Las declaraciones del ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, sólo echaron leña al fuego. Dijo que la problemática del transporte es potestad de las provincias. Es lo que sucedió desde enero y que llevó a colapsar el sistema”, expresó el sindicalista.
“La Nación subsidia a las empresas del área metropolitana (AMBA). Es muy difícil mantener algo cuando no es verdad. Hay empresarios que tienen empresas y dicen que les depositan la plata. El subsidio llega. Después dicen que lo pone (Horacio) Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal en Provincia. No es verdad que no se subsidie”, se quejó el dirigente, quien sostuvo que desde que los subsidios quedaron a cargo de las administraciones provinciales, “algunas están al día, y otras se demoran”.
Por su parte, la Fatap sostuvo que no hay fondos posibilidad de pagar los aumentos, y reclaman más subsidios.
Los empresarios sostienen que, para pagar el aumento pretendido por los choferes, hay dos opciones: aumentar más los boletos o lograr más subsidios.