El IA-100, un biplaza de entrenamiento militar básico. Una de las gerencias que se eliminó es la que estaba a cargo de este proyecto. Foto: Gentileza.
La Fábrica Argentina de Aviones Brigadier General San Martín (FADEA) despidió el fin de semana a 35 empleados. La medida forma parte del ajuste de la estructura de conducción de la compañía, según pudo saber ENREDACCIÓN. Los cesanteados corresponden a seis de las doce gerencias que tenía hasta el momento la empresa. Hasta anoche no se tenía confirmación sobre si las medidas iban a continuar hacia abajo de cada organigrama. Las funciones de cada una de las gerencias suprimidas serán distribuidas en la seis gerencias sobrevivientes, de acuerdo a la información que brindó la empresa. Mientras que fuentes del Ministerio de Defensa dijeron a este medio, que hay distintas ideas de readecuación de la empresa y que en las próximas horas serán cruciales respecto al destino de FADEA.
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Dos de las gerencias que fueron eliminadas de la estructura fabril, corresponden a un proyecto productivo (el avión IA100) y al área de mecanizado, que es el sector que provee de piezas a los proyectos de fabricación. La acción, implica, al menos, que los proyectos para la Fuerza Aérea perderán jerarquía.
A partir de la asunción del gobierno de Mauricio Macri en diciembre de 2015, FADEA redujo su planta de personal desde 1597 operarios a los 1.050 actuales, a través de retiros voluntarios, jubilaciones anticipadas y despidos.
El ingreso a la planta fabril de FADEA. Foto: Gentileza.
FAdeA fue fundada en 1927 e inició su historia desarrollando aeronaves bajo licencias europeas hasta 1931, cuando diseñó y construyó el primer avión nacional. En 1944, en la gestión del mayor ingeniero Juan Ignacio San Martín, la empresa produjo un salto que le permitió emplear a más de 9.000 personas en el complejo industrial I.A.M.E. (Industrias Aeronáuticas y Mecánicas del Estado), donde se construían aviones, motores, hélices y accesorios, además de vehículos utilitarios, automóviles, tractores y motocicletas.
QUÉ DIJO FADEA
En el comunicado de prensa dado a conocer el viernes, FADEA que ahora es conducida por Antonio Beltramone, recalcó que “se siguieron las pautas legales y que no se trata de una medida aislada, sino que se enmarca en un conjunto de acciones que se están realizando para reestructurar y reorganizar a la fábrica de modo de lograr el equilibrio en todos los niveles de la organización”.
La “adecuación se realiza teniendo en cuenta el volumen de trabajo actual y el esperado, sin afectar el curso de los programas en ejecución ni las capacidades que serán estratégicas en el futuro próximo”.
Antonio Beltramone, el actual presidente del directorio de FADEA. Foto: Gentileza.
La firma agrega que “para entender la situación actual, se debe analizar a FADEA dentro del contexto nacional. Cuando asumió el nuevo gobierno nacional encontró empresas públicas mal administradas, sin coordinación ni estrategia comercial, con déficit y que incumplían su compromiso con la sociedad”.
“La actual situación de FADEA es resultado de años de gestiones ineficientes que hoy llevan a tomar medidas difíciles y poco gratas, pero necesarias para lograr revertir las gravísimas consecuencias que pueden generarse”, sigue explicando el comunicado.
Agrega que “en los últimos dos años se redujeron considerablemente los costos de funcionamiento y se trabajó en la adecuación de la dotación de personal, actualmente, gran parte de los fondos que recibe la compañía provienen del aporte de todos los argentinos”.
Por último, FADEA dijo que “profundizará el proceso para redimensionar la estructura en busca de la eficiencia en todo sentido y la generación de nuevos negocios que incrementen el actual nivel de ingresos”.
QUÉ ESTÁ HACIENDO LA FÁBRICA
El problema central de FADEA en la actualidad, es que no tiene proyectos productivos en marcha, salvo la fabricación de las compuertas para el avión de carga militar de la brasileña Embraer.
Estos proyectos, además de producir para Embraer, son los siguientes:
-El desarrollo del IA100 y el IA74. El primero es una versión para entrenamiento militar básico y el segundo, con un motor de menor potencia, permite el entrenamiento básico de pilotos civiles en aeroclubes.
-La producción del IA63-Pampa III, modernizado fundamentalmente en su aviónica y armamento, con el objetivo de reemplazar a todas las unidades del IA63 existentes y en servicio en la Fuerza Aérea, está detenida.
El IA-63 Pampa III.
El secretario General de la Asociación del Personal Aeronáutico, Luis Ortega, dijo que esos proyectos están parados. “No hay recursos ni insumos para esas líneas de trabajo. Hasta el momento no arrancaron”, le dijo anoche a este medio.
Dentro de ese contexto, la desactivación de las gerencias del IA-100 y la de mecanizado implica una caída de jerarquía y, por tanto, de relevancia del esquema de producción en favor del de mantenimiento. Este escenario reduce notoriamente el papel industrial de FADEA y la convierte en una empresa de servicios.
Los contratos en vigencia son los siguientes:
-El mantenimiento a aeronaves de la Fuerza Aérea hasta diciembre de 2018. El monto del acuerdo es de 1.587 millones de pesos. El convenio incluye la “prestación de servicios aeronáuticos, comprendiendo programas de ingeniería, mantenimiento, reparación, recorrida general (overhaul), fabricación de partes, apoyo al usuario, re-certificación, habilitación de nuevas capacidades, servicios de apoyo logístico, servicios aeronáuticos y servicios generales”.
-FADEA está modernizando y manteniendo los Hércules C-130 de la Fuerza Aérea Argentina. La relevancia de esta actividad radica en que la compañía quedaría certificada como una compañía regional con capacidad para desarrollar estas tareas y con experiencia para ofrecer sus servicios en el mercado sudamericano de aeronaves de este tipo.
-Produce chalecos antibalas y vallas de contención.
QUÉ DICE EL GREMIO
Ortega, adelantó anoche que su gremio se encuentra en estado de asamblea hasta tanto la nueva conducción de FADEA no explicite el plan de producción que tiene para 2018.
-¿Por qué la empresa sigue achicándose? le preguntó ENREDACCIÓN.
-Desde 2015 a esta parte todas las posibilidades que tenía la fábrica de proyectar un proyecto serio como industria argentina se han venido cayendo. Hubo tres directorios distintos y ninguno de los tres logró, con responsabilidad, hacer funcionar la fábrica.
Si el Ejecutivo no habilita, no se va a reactivar. La fábrica depende del humor de Marcos Peña (Jefe de Gabinete). Y por lo visto, no me parece que tenga interés” (Luis Ortega, APA).
-Los proyectos del Pampa III o el IA100 fueron anunciados, ¿por qué no comenzaron?
Sucede que todo es en el aire, en proyecto, en carpeta… si el Ejecutivo no habilita, no se va a reactivar. La fábrica depende del humor de Marcos Peña (Jefe de Gabinete). Y por lo visto, no me parece que tenga interés. Hoy, FADEA, es un cementerio de muchas voluntades, es una sensación horrible. La gente quiere trabajar, quiere a la fabrica, le pone mucho esfuerzo, pero si no hay voluntad y decisión política para que esto funcione, no va a funcionar.
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