Sucedió en Villa María ayer por la mañana. Los trabajadores de la Fabrica Militar de esa ciudad cordobesa decidieron plantearle sus demandas por los 70 despidos ocurridos en la planta fabril desde 2017 a la diputada nacional Elisa Carrió, que llegó a la ciudad en el marco de la campaña de Mario Negri a la gobernación.
La legisladora se comprometió a recibir la lista de trabajadores de la planta, la mayoría contratados, y de los despedidos.
Cabe recordar que en Villa María hubo 42 despidos y en Río Tercero 59, en la segunda ola de cesantías, luego de los realizadas a fines de 2017 (220 en Azul, con el cierre de la planta de esa ciudad, 28 en Villa María y 25 en Río Tercero) e implican una prolongación del ajuste en el sector de producción para la Defensa.
El área depende del ministro de Defensa Oscar Aguad, que en su momento justificó la medida diciendo que “en el caso de Fabricaciones Militares el déficit es de 1.600 millones de pesos por año y eso lo enfrentan todos los argentinos y las empresas. Nadie puede pensar que el país, después de 70 años de dilapidar recursos y corrupción sistemática, puede salir de la crisis sin sacrificios”.
Los trabajadores, nucleados en ATE, también le plantearon su descontento por la falta de tratamiento en la Cámara de Diputados de tres proyectos que protegen el empleo en las fábricas y que cuestionan los cambios jurídicos dispuestos en la Dirección General de Fabricaciones Militares (DGFM). Carrió respondió que no los conocía pese a que intentaron ser tratados en una sesión especial de la cámara baja este año, y prometió una reunión el Ministerio de Defensa para poder para poder trabajar sobre estos tres planteos.
Se trata de iniciativas que plantean congelar los despidos, reincorporar personal despedido y retrotraer la situación de Fabricaciones Militares de sociedad del Estado como estableció el presidente Mauricio Macri a empresa pública no sujeta a privatización de su capital.
Por último, denunciaron al director de Producción de Fabricaciones Militares, teniente Coronel José Lucioni por percibir tres salarios del Estado: uno como director de producción de la Dirección de Fabricaciones Militares, otro por su cargo militar y el último como docente de la Universidad Tecnológica Nacional de Villa María (UTN).
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