Esta Copa del Mundo está teñida de argentinidad y no es un detalle menor. Sergio Hernández, Julio Lamas, Fernando Duró y Néstor García, son los entrenadores de Argentina, Japón, Venezuela y República Dominicana, respectivamente. Con la primera fase del mundial terminada, tres de los cuatro DTs lograron clasificar a sus equipos a la siguiente ronda. El único que quedó en el camino, fue el Japón de Lamas, que cayó derrotado ante tres rivales durisimos: Estados Unidos, Turquía y República Checa.
Esta es la segunda vez en la historia con tantos entrenadores de una misma nacionalidad. Solo superados por los cinco entrenadores estadounidenses que dirigieron en Turquía 2010. Una evidencia de la calidad de los DT argentinos, que son símbolo de una escuela del básquet nacional, curtidos con las enseñanzas de León Najnudel hace 30 años en los comienzos de La Liga.
Carisma, personalidad, conducción, trabajo, gestión, formación y mucha experiencia en mundiales son el combo que cargan en la mochila Hernández, Duró, Lamas y García. Cada uno a su manera, continúan haciendo historia en sus seleccionados.
ARGENTINA
La selección nacional integró el Grupo B y clasificó a la segunda fase sin sobre saltos. Con un récord de 3-0 que vino como consecuencia de los triunfos ante Corea del Sur (95-69), Nigeria (94-81) y Rusia (69-61). De esta manera, arrastró puntaje perfecto para la segunda ronda; donde forma parte del grupo I, junto a Polonia, Venezuela y Rusia.
El “Oveja”. Foto: FIBA.
Por ahora, los dirigidos por el “Oveja” siguen firmes en la búsqueda del objetivo: clasificar a los Juegos Olímpicos Tokio 2020. Para eso deberán clasificar entre los dos equipos americanos mejor posicionados: una tarea difícil, ya que seis equipos americanos lograron pasar a esta fase. Para Sergio Hernández está es su tercer experiencia a cargo del seleccionado en un Mundial, las otras dos fueron en Japón 2006 y Turquía 2010.
REPÚBLICA DOMINICANA
Como conductor de Dominicana, Nestór García tuvo que imprimirle su rigor al equipo caribeño en apenas 45 días, ya que su designación se confirmó en junio último. A pesar de ello, logró una clasificación histórica a la segunda ronda con un triunfo agónico ante Alemania por 70 a 68. Por si fuera poco, fue la primera vez que Dominicana le ganó a un equipo europeo en competiciones internacionales.
El equipo del “Che” integró el áspero Grupo G junto con Alemania, Francia y Jordania. En el primer partido superó a Jordania (equipo de Dar Tucker) por 80 a 76, luego hizo lo suyo ante los alemanes y cayó derrotado ante Francia por 90 a 56. De esta manera, con un récord de 2-1 clasificó al grupo L, donde lo esperan tres potencias: Australia, Lituania y Francia.
República Dominicana hace historia… ¡y se clasifica para la segunda fase del Mundial!
Con @ecbaez13 y @sadielrojas como líderes en la pista y @NestorCheGarcia en el banquillo.
🎥 vía @FIBAWCpic.twitter.com/29hgBTWejz— Liga Endesa (@ACBCOM) September 3, 2019
“Cuando me llamaron estaba la expectativa que vinieran los NBA (Al Horford y Karl Anthony Towns) y ellos por diferentes motivos no están. Aun así, con estas ausencias, el grupo que tengo dejó el alma. A nosotros nadie nos daba entre los dos clasificados y desde ahí es que insistimos e insistimos. Me llevé una grata sorpresa con el apego que tiene este grupo por el trabajo. Es un grupo que deja la piel y hacen buenas cosas para jugar a nivel internacional. Más allá del resultado, ver este progreso es gratificante”, afirmó García luego de la clasificación.
VENEZUELA
Para Fernando Duró este es su cuarto Mundial y el primero como entrenador principal. Comenzó su aventura mundialista con Guillermo Vecchio en Toronto 1994, después acompañó a Rubén Magnano en Indianápolis 2002, siguió a Magnano en su experiencia como seleccionador en Brasil y participó de Turquía 2010.
El abrazo. Fernando Duró hace historia con la “Vinotinto”. Foto: FIBA.
Junto con Argentina, la “Vinotinto” fue de las selecciones americanas que le tocó un grupo accesible. En este caso compartió el Grupo A junto con China, Costa de Marfil y Polonia. El equipo de Duró finalizó con un récord de 2-1, al vencer a Costa de Marfil (87-71) y China (72-59), y caer ante Polonia (80-69). Es por eso que clasificó a la segunda fase, e integra el Grupo I, al igual que Argentina.
“No todos los días se puede jugar en China, contra China y jugándonos la clasificación a la segunda fase. Hemos dominado los tableros ampliamente, hemos hecho un soberbio trabajo de equipo. Todavía hay cosas por explotar en el equipo, pero hoy es un día de gran festejo e histórico para el baloncesto de Venezuela: hemos pasado por primera vez en la historia a la segunda ronda”, explicó el entrenador minutos después de la victoria ante China.
JAPÓN
Para Julio Lamas este es su segundo mundial como entrenador principal. El anterior fue con la selección Argentina en España 2014, donde logró pasar la primera fase, pero quedo eliminada en octavos ante Lituania. Justamente entre Hernández y Lamas compartieron más de 10 años como entrenador y asistente. Alternaron los cargos sin tener problemas de cartel. De la misma manera que Néstor García fue entrenador principal en el Sudamericano 2012 y fue asistente de Lamas en el Preolímpico 2011 en Mar del Plata.
A pesar de haber logrado clasificar a Japón luego de 21 de ausencias mundialistas (1998 en Grecia) con un sprint final de 8 victorias y 0 derrotas; el equipo se vio superado ampliamente por los rivales del Grupo E. Las aspiraciones antes de comenzar era ganar al menos un partido, pero cayó derrotado frente a Turquía (86-67), República Checa (89-76) y terminó vapuleado por Estados Unidos (98-45). Aunque no pudo conseguir una victoria, el balance es más que positivo.
Julio Lamas. Foto: FIBA.
La experiencia de haber enfrentado a tres potencias del básquet mundial, le sirve mucho a un país que será anfitrión de los próximo Juegos Olímpicos y que tiene asegurada su participación. Además su camino en la Copa del Mundo continúa, ya que integrará el Grupo O de la zona de Re-clasificación junto a Nueva Zelanda, Montenegro y Turquía. Es decir, que todavía tiene posibilidades de conseguir el tan ansiado triunfo.
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