Sergio Massa confirmó que será el primer candidato a diputado nacional del Frente de Todos para la provincia de Buenos Aires y que por lo tanto no competirá por la candidatura presidencial con Alberto Fernández en las PASO. “Lo más importante hoy es darle a la Argentina la posibilidad de un nuevo gobierno”, afirmó.
Massa eligió el ciclo de entrevistas en el Malba, en el que también participaron Miguel Angel Pichetto y Juan Manuel Urtubey, sus viejos compañeros en Alternativa Federal, para confirmar el cierre de las negociaciones con Alberto Fernández y Máximo Kirchner.
Con Massa en el Frente de Todos, Pichetto en Juntos por el Cambio, Urtubey en Consenso 2030, y el gobernador Juan Schiaretti recluido en Córdoba, quedó sepultada la tercera vía planteada con eje en un peronismo moderado y neoliberal. Ahora, la diaspora de los peronistas de Argentina Federal nutre a todas las formaciones político-electorales que participan con mayores aspiraciones en los comicios generales de este año.
“Cuando en el 2009 tomé la decisión de irme del gobierno, decidí irme y seguir cuestionando. En 2013, cuando la gran mayoría de la dirigencia peronista hacía silencio con la posible reforma de la Constitución yo tomé la decisión de romper con mi partido. Pero hoy 7 de cada 10 argentinos quiere un nuevo gobierno. Hay que escuchar lo que quiere la gente y no quedarse en el microclima de la política”, explicó.
“Tomamos la decisión de encabezar la lista de diputados nacionales de la provincia de Buenos Aires. De abrirnos a la posibilidad que nos han planteado de presidir desde el 10 de diciembre la Cámara y apostar a que Alberto, que es un gran candidato a presidente, tenga la posibilidad de ser el candidato del Frente de Todos”, dijo Massa.
De este modo, la última posibilidad de que se desarrollara competencia entre fórmulas en las PASO quedó desactivada. Por lo tanto, las eleccones primarias de agosto de este año serán una formalidad.
El tigrense cerró blanqueó el acuerdo completo para integrar a los peronistas renovadores a la coalición con el PJ y el kirchnerismo, conformando una inédita alianza de la mayor parte de los peronismos que circulaban desde la salidad del poder en 2015 por andariveles separados.
Cristina había sido la más reacia a que hubiera interna para definir la fórmula presidencial. La ex presidenta consideraba que el peronismo moderado podía ser un riesgo en una elección de este tipo y que más allá de una victoria electoral, la dinámica de la confrontación interna pudiera habilitar un enfrentamiento que lastimara el proceso de unidad que se puso en marcha el 18 de mayo pasado.
A su vez, desde el massismo consideraban que participar de una PASO, donde la derrota era previsible ponía a todo el sector ante la posibilidad concreta de quedar sin espacios de poder después de los comicios generales. Por eso, durante todo este tiempo, tensaron con la posibilidad para poder abrir las listas en todos los niveles.
El dirigente bonaerense apuntó que “Alberto Fernández es un gran candidato a presidente y ojala tenga la posibilidad de darles a los argentinos un nuevo gobierno”.
“Tomé la decisión pensando en los miles de argentinos que se quedan sin trabajo. Hay 200 mil pymes en crisis. Hay una situación de pobreza que negarla no sirve para resolver los problemas. Creemos que nuestra responsabilidad más importante hoy es darle a la Argentina la posibilidad de un nuevo gobierno. Lo real y lo concreto es que hay mucha gente que la está pasando muy mal y quiere que construyamos consensos y políticas de Estado”, señaló el tigrense.
“Creo que es un tiempo donde cada uno tiene que tener una dosis de humildad y saber hasta dónde le da la capacidad para pelear en el momento o lugar, siento que nuestra responsabilidad hoy debe estar más puesta en construir esa gran mayoría opositora que nos pidió el congreso del Frente Renovador. Y más allá de mi interés personal y de mi lugar personal, nuestra responsabilidad es darle a los argentinos la posibilidad de que construyamos una nueva mayoría”, expresó finalmente Massa.
Con esta jugada, el Frente de Todos irá en la provincia con una boleta integrada por Alberto y Cristina en el tramo presidencial, Axel Kicillof y Verónica Magario para la gobernación, y Massa para diputados. Resta por definir quién ocupará el segundo lugar, que corresponde a una mujer, mientras que el tercer casillero quedaría para Máximo.