Faltan menos de 24 horas para que Instituto debute por primera vez en la Champions League América (Viernes 1, a las 21:30). La ansiedad comienza a notarse en las miradas de los jugadores, que lanzan al aro en el penúltimo entrenamiento antes de dar el salto inicial contra el poderoso Flamengo de Brasil. Martín Cuello conocido popularmente como “Loku”, es el último en salir del vestuario y emprender camino hacia la calle Jujuy, donde un colectivo con sus compañeros lo espera para depositarlos en la concentración.
“Lo veo bien al equipo. En lo personal me siento bien, sabemos que es un partido muy importante para el club, para nosotros, así que lo vamos a tomar como tal. En estos momentos lo vivimos con mucha ansiedad por lo que implica el torneo pero estamos concentrados para arrancar de la mejor manera”, explica rápidamente el alero. Gastón Whelan nos espera a un costado, mirando de reojo y haciéndole el aguante a su compañero para no perder el colectivo.
El alero de Ramos Mejía conoce de primera mano lo que es jugar un torneo internacional. En su carrera disputó dos Ligas de las Américas, una siendo un juvenil con la camiseta de Lanús (donde fue subcampeón) en el equipo de Nicolás Laprovittola, y la otra con Ferro, en 2017, llegando a semifinales, cuando quedó afuera contra el campeón San Lorenzo. Además, la temporada pasada, en Libertad de Sunchales fue uno de los mejores del equipo en La Liga Sudamericana llegando también a las semifinales.
Esta vez, Cuello llega al debut siendo uno de los goleadores del equipo cordobés y con 26 años: “A diferencia de esos torneos, que tuve la suerte de jugar, acá me siento más participe del equipo, con más minutos que en mi época de juvenil donde mi incidencia fue escasa. Además, al ser la primera edición del torneo de la Champions lo hace más motivante aún”.
¿Cómo te imaginas el partido?
Creo que va a ser un clima bárbaro, con mucha ansiedad por parte de los dos equipos, porque estamos debutando en el torneo, y creo que va a ser un partido durísimo, por el rival que tenemos en frente. Lo bueno, es que tenemos la confianza de estar acá en casa y eso es muy importante.
¿Motiva jugar contra un candidato?
Sí, al ser un equipo que ganó todo en Brasil, con muy buenos jugadores, motiva darle pelea, pero lo que más nos motiva es el debut en la competencia y que sea acá, en casa.
¿Qué aspecto debe explotar mañana Instituto para tener chances de ganarle a Flamengo?
Ellos tienen muchos anotadores, así que principalmente tenemos que estar bien defensivamente. Creo que ese va a ser el punto más importante para poder competir contra el Flamengo. En ataque, vamos a tener que ser lo más fluido posible con los pases, ellos capaz no sienten tanto el compromiso en defensa, así que tenemos que apostar a ese lugar.
En defensa te toca una complicada, marcar a Marquinhos (Vieira)…
Sí, es un jugador que tiene mucho gol en sus manos, así que vamos a tratar de contenerlo como equipo y no sólo yo. Al tener muchas variantes y ser el goleador, hay que estar enfocados en reducirlo.
Llegaste hace dos meses a Córdoba, ¿Cómo te sentís con el equipo y con la gente de Alta Córdoba?
La verdad que me siento bien con el equipo, con el grupo y eso me hace sentir cómodo. Sé que hay cosas importantes por pelear y eso también ayuda a sentirse contento. Instituto siempre aspiró a pelear entre los primeros puestos en los últimos años y eso me motivó a venir. Además me recibieron con todo listo; con departamento en el barrio y todo en orden para que yo solo tenga que poner la cabeza en el equipo, por eso estoy muy contento de estar acá.
¿Fuiste a ver al equipo de fútbol?
Sí, fui varias veces a la cancha y se arma un muy lindo clima, porque se vive muy intensamente todo. Me gusta que la hinchada siga tanto al fútbol como al básquet, porque suma un montón.
Si tuvieras la posibilidad de elegir un partido ideal contra Flamengo, ¿cómo sería?
Uff (risas)… y uno piensa todo el tiempo en la cabeza cómo se va dar partido, y siempre me quedo con la sensación de que va a ser muy duro, pero que capaz, con el apoyo de la gente y el ambiente que generemos, podamos lograr un buen rendimiento y llevarnos el triunfo. El empuje va a ser clave y jugar en el Sandrín ayuda un montón.
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