Corría el año 2012 cuando comenzamos las gestiones para la eliminación del IMPUESTO A LAS GANANCIAS. Por aquellos años, en representación de nuestro Sindicato, viajábamos a Buenos Aires, para presentar notas y reunirnos, entre otras personas, con los entonces diputados nacionales, Héctor Recalde, Oscar Aguad, Héctor Baldassi, otras autoridades parlamentarias y el equipo técnico de la AFIP.
Si algo no ha mermado en estos años, es nuestro pedido permanente por la eliminación de dicho impuesto, al que consideramos una confiscación injusta hacia los trabajadores y trabajadoras.
Los años pasaron y dicho impuesto se convirtió en un tema central de la campaña presidencial del año 2015. Muchos trabajadores votaron al candidato y luego presidente, Mauricio Macri por la promesa de eliminar dicho impuesto; algo que finalmente no solo no ocurrió, sino que más trabajadores empezaron a pagarlo.
La falta de escucha del arco político, en su conjunto, sin distinción de ningún partido, dificulta poder lograr avances más circunstanciales en el objetivo mayor, que es la eliminación absoluta del IMPUESTO A LAS GANANCIAS.
Es verdad que en estos años se ha podido lograr el aumento de topes, pero también es cierto que el poder adquisitivo se ha deteriorado por la devaluación de nuestra moneda y por la alta inflación que tiene nuestro país, por que dicho aumento, es en definitiva una compensación de dicha inflación.
Recientemente, las organizaciones sindicales unidas en la CATHEDA (Confederación Argentina de Trabajadores, Empleados de los Hidrocarburos, Energía, Combustibles, Derivados y Afines), cuyo vicepresidente es Guillermo Moser, secretario general de la FATLyF, se reunieron para llevar adelante medidas que resuelvan esta deuda que tiene el Estado Argentino y todos los gobiernos de los últimos 15 años, en relación al impuesto a las ganancias.
Apelamos una vez más a que el gobierno y los partidos que conforman nuestro Congreso, escuchen a los trabajadores y pueda resolver nuestra demanda; que es totalmente justa. Creemos en el diálogo para resolver dicho conflicto. Como movimiento obrero unido, no bajaremos los brazos y continuaremos con el reclamo hasta lograr nuestro objetivo.
No dejaremos de levantar la voz de los trabajadores y trabajadoras. Le decimos NO al impuesto a las ganancias. La remuneración por las horas trabajo, realizadas con dedicación, esfuerzo y compromiso, no pueden ni deben ser un impuesto.
Por Máximo Brizuela, secretario General del SiReLyF.