No está muerto quien pelea. “La Gloria” fue de menor a mayor y logró un triunfo histórico por 75 a 66 sobre San Lorenzo en tiempo suplementario. Ante su gente que copó el Ángel Sandrín, el equipo cordobés pudo remontar una diferencia de 21 puntos, para poner la serie 2 a 1 y así permitirse soñar con empatar la final. Los goleadores fueron Rodney Green y José Vildoza, ambos con 18 puntos.
Finalmente Instituto logró algo que parecía imposible. El quinto juego fue el vencido, ya que en los otros cuatro enfrentamientos del 2019 habían sido derrota para los cordobeses. La embestida que logró en el tercer cuarto (lo ganó 26 a 15), fue clave para devolverle la confianza y la actitud al equipo, que demostró el caracter necesario para quebrar al tricampeón. Es cierto, le hizo falta un suplementario, y la última bola la tuvo la visita, que falló y no pudo aguantar el ritmo del albirrojo.
La noche no había empezado bien para el local. Las falencias ofensivas costaban puntos en el otro lado de la cancha y rápidamente el dominio del juego fue para “El Ciclón”. A diferencia de los dos juegos anteriores, San Lorenzo pudo romper con facilidad la primera línea defensiva y terminó anotando 28 puntos en el primer cuarto. En el juego 1 había marcado 19 y en el juego 2 había alcanzado las 21 unidades. En ese sentido, Vildoza y Dar Tucker fueron el motor de la ofensiva azulgrana a través del desequilibrio y los triples.
Otra vez, todo cuesta arriba para Instituto. Con un arranque desalentador, la gente que llenó las tribunas comenzó por primera vez en la temporada a transmitir tensión y nerviosismo, dejando de lado el aliento ensordecedor. La diferencia a favor del equipo de Marcelo Tinelli llegó a ser de 21 puntos (38 a 17) en el segundo cuarto, sembrando el terror en Alta Córdoba. Todo parecía inclinarse en contra de “La Gloria”, pero apareció la reacción en los últimos cinco minutos de ese segundo período. Con una racha de 12 a 0, el albirrojo logró acortar la diferencia a un solo dígito, y terminó sacándola barato al irse al vestuario abajo 43 a 31, luego de un buen cierre de San Lorenzo.
En contra de la lógica de la serie, Instituto tuvo su mejor parcial en el tercer cuarto. Corriendo la cancha, ajustando en defensa, encestando triples y aprovechando la baja efectividad del tricampeón, los cordobeses ganaron contundentemente esos diez minutos: 20 a 8. En parte fue mérito del local, pero los de Boedo cambiaron totalmente su estilo de juego. Priorizando más los embates individuales por sobre el reparto del balón, San Lorenzo dependió mucho de Tucker y Aguirre para generar algún peligro, y estos no tuvieron su mejor noche.
“Evidentemente Instituto hizo algo para que nosotros no pudiéramos seguir con el hilo del juego, y como que nos nublamos bastante en el segundo tiempo. No hubo ninguna directiva de cambio de estilo de juego, porque en definitiva lo veníamos llevando bien, pero creo que perdimos ese juego de pases que tan bien nos había salido antes”, declaró Gonzalo García el DT azulgrana a la salida del vestuario.
El último cuarto comenzó con el partido igualado en 51 por bando. Un buen arranque albirrojo, le permitió sacar una distancia interesante de siete puntos de cara al final. Pero en los últimos cinco minutos, San Lorenzo apretó el acelerador e igualó esa diferencia para meterle picante al final. Justamente el cierre de Instituto no fue bueno; primero se topó con un tapón tremendo de Joel Anthony contra Green, y después del rebote ofensivo de Sam Clancy, “El Chuzo” tomó un tiro apresurado que no entró. De esta manera, Tucker tomó el rebote con 12 segundos en el reloj e intentó un triple de alta dificultad luego de un aclarado, pero el disparo no entró.
En el tiempo suplementario, las piernas frescas de uno y otro equipo fueron la clave. “La Gloria” con el empuje de su gente y un poco más de resto físico, logró quebrar a un rival cansado que solo anotó 2 puntos en esos cinco minutos (sin anotar tiros de campo). En cambio los cordobeses aprovecharon el temblequeo del campeón y lograron tumbarlo después de un año sin ganarle.
La historia de La Liga Nacional dice que solo dos equipos pudieron revertir un 0-2 en 26 finales. Instituto acostumbrado a pelear de atrás en esta serie, anoche finalmente tuvo su premio. Veremos si esta victoria sirve para sacarse la presión y las dudas, e ir en busca de la hazaña contra el equipo favorito. En ese sentido, será fundamental alargar la serie lo máximo posible, porque del otro lado las lesiones y el cansancio son moneda corriente.
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