Las definiciones se suceden. El politólogo y consultor político Gustavo Córdoba habla muy rápido y casi que dispara una detrás de otra. “Kicillof sepultó en la provincia de Buenos Aires el presente y futuro de Cambiemos, porque derrotó a María Eugenia Vidal que era el recambio” (La del título, referida a la victoria que obtuvo en la estratégica provincia de Buenos Aires). “Matemáticamente, el presidente puede entrar en el ballotage, pero si le aplicamos una cuota de realismo político, es muy poco probable que se recupere” (Elecciones del 27 de octubre). “La idea de que pongo plata en el bolsillo de la gente, le digo que ya me di cuenta del mensaje electoral que me dieron las urnas, es una mirada naif para entender el contexto político argentino (La situación post-PASO del 11 de agosto). “Macri va a ganar en Córdoba, no veo que esté amenazado su triunfo. Por ahora, es así” (Los comicios del 27 de octubre).
Córdoba analizó la encuesta nacional que realizó entre el 22 y 23 de agosto en todo el país y que ENREDACCIÓN publicó en su edición del lunes 26.
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El tramo principal de la conversación es el siguiente.
¿Tiene posibilidades de recuperarse el presidente Mauricio Macri el 27 de octubre y llegar al ballotage?
Matemáticamente puede entrar en el ballotage, pero si le aplicamos una cuota de realismo político, es muy poco probable que se recupere. El contexto internacional es muy complejo, la devaluación del Yen, la devaluación del peso frente al dólar que ahora va a impactar en los precios… A ello, se le suma que no estamos indemnes a que no ocurra una situación semejante a que sucedió después de las PASO, la cantidad de dólares que se van de las reservas, no veo elementos para ser optimista. Por eso, la idea de que pongo plata en el bolsillo de la gente, le digo que ya me di cuenta del mensaje electoral que me dieron las urnas, es una mirada naif para entender el contexto político argentino.
¿Córdoba va a seguir siendo macrista o aquí también puede perder?
Macri va a ganar en Córdoba, no veo que esté amenazado su triunfo. Por ahora, es así.
¿Por qué Fernández logró un resultado con esa diferencia sobre el presidente y esa distancia no pudo ser detectada?
El voto a Alberto Fernández ya estaba, pero quizá no en la magnitud en que se dio finalmente en la elección. Se veía en las encuestas domiciliarias, pero no en las telefónicas. El voto tuvo una particularidad, tuvo muy en cuenta la política económica del gobierno. En contexto de crisis, como el actual, pensar, cómo lo hizo el gobierno, de que la sociedad iba a votar por el voto ideológico fue un error. Sin duda hubo otros votos, “voto económico”, “voto clasista”, que es el voto del núcleo duro, anti-kirchnerista. Pero al no poder entender la lógica de movilizar a otros votantes cercanos, como por ejemplo los de (Roberto) Lavagna o (José Luis) Espert, que se definían por un voto de critica a la política económica; o los de (Juan José) Gómez Centurión, que lo hacía por su adhesión al pañuelo celeste, le costó caro. En definitiva, ese error de lectura le costó caro. A su vez, en la elección del 11 de agosto, hubo un fuerte castigo al gobierno por la política económica, diría que hubo un voto repudio. Por ejemplo, el voto Pyme, donde tanto empleados como empresarios fueron agredidos por la política económica de este gobierno.
En la elección del 11 de agosto hubo un fuerte castigo al gobierno por la política económica, diría que hubo un voto repudio.
¿Hubo algún momento de quiebre de la campaña que modificara el escenario?
El Frente de Todos arrancó mal, con una campaña mal trazada, pero cuando empezaron a hablar de economía tuvieron sus primeros hits y cuando el gobierno le respondió en temas económicos, se derrumbó. Pese a que todos los factores de poder, los empresarios, los principales medios, los inversores extranjeros, y los gobiernos de países vecinos como el de Jair Bolsonaro y de otras regiones del mundo, apoyaron la candidatura de Macri, cuando habló de economía, el gobierno no pudo sostenerse. El PJ, con la incorporación de Sergio Massa, desencadenó un factor estratégico que fue la victoria de Axel Kicillof en la provincia de Buenos Aires. Kicillof sepultó presente y futuro de Cambiemos porque derrotó de manera contundente a María Eugenia Vidal que era el recambio.
El PJ, con la incorporación de Sergio Massa, desencadenó un factor estratégico que fue la victoria de Axel Kicillof en la provincia de Buenos Aires. Kicillof sepultó presente y futuro de Cambiemos porque derrotó de manera contundente a María Eugenia Vidal que era el recambio.
¿Cómo se explica que siga creciendo el voto a Fernández?
Por exitismo y pragmatismo. Los votantes que antes veían una chance en Macri, se mueven con Alberto ahora. No veo un Macri que haga una elección mejor que el 11 de agosto, en cambio a Fernández lo veo creciendo en términos electorales, es probable que, por ejemplo, en Córdoba, esté con potencialidad de llegar al 40 por ciento. Macri puede crecer aquí, pero alrededor de 5 puntos. A su vez, un crecimiento de 10 puntos de Alberto, implica 1 punto nacional. Estamos frente a votantes pragmaticos, que el cambio de contexto los lleva a votar a Alberto Fernández.
¿Qué pasó para que se produzca este cambio de comportamiento electoral?
Que mucha gente cambio de liderazgo en medio de la crisis, vieron que Macri no era el indicado para liderar la nave argentina. Además, el gobierno precipitó la jugada porque indicó que esta era la elección y no otra. En ese contexto, de que esta era la elección, perdió.
Mucha gente cambio de liderazgo en medio de la crisis, vieron que Macri no era el indicado para liderar la nave argentina.
¿Por qué no prenden las ideas que ha intentado plantar el gobierno?
No prenden las ideas porque el gobierno tiene una doble responsabilidad, que es gobernar y actuar como retador del ganador de las PASO, y ha cometido un error clave, que es continuar en tono de campaña. Debiera tener un tono más moderado.