El Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa anunció que convocará a una huelga general en Vaca Muerta debido a la paralización de la actividad y los despidos masivos en la industria. En una rueda de prensa, el secretario general, Marcelo Rucci, expresó su preocupación: “Si esto no cambia, vamos a ir a un paro total”.
El dirigente denunció que las empresas han despedido a alrededor de 1.200 trabajadores y mantienen a más de 2.000 con jornadas reducidas de 8 horas, cobrando solo el salario básico, lo que calificó como “el preludio de despidos”.
Rucci criticó duramente a las empresas petroleras, acusándolas de actuar con una lógica especulativa: “No es que pierdan plata, están dejando de ganar un poco. Y lo hacen a costa de nuestros compañeros”. El dirigente señaló que, pese a los récords de producción alcanzados —como la posibilidad de llegar a los 600.000 barriles este año, una meta prevista para 2026—, las compañías no han establecido un “puente” para sostener la actividad hasta el próximo año, afectando gravemente a los trabajadores.
“Se equivocaron feo al tocar la dignidad y el orgullo de los trabajadores”, afirmó, y enfatizó: “Vaca Muerta solo será posible con los trabajadores adentro. Sin ellos, no hay futuro”.
El gremio anticipó que esta semana se reunirá la Comisión Directiva para definir los detalles de la medida de fuerza. “Fuimos responsables y buscamos el diálogo, pero no hubo respuesta. Si hay que quebrar lanzas para que nuestros compañeros vuelvan a sus puestos, lo vamos a hacer”, aseguró Rucci.
En paralelo, el sindicato renovó sus autoridades hasta 2030 en una elección con una participación del 80% del padrón de más de 25.000 afiliados. Un total de 20.037 trabajadores votaron en 262 mesas distribuidas en yacimientos, bases operativas y localidades de la Cuenca Neuquina. La lista Azul y Blanca, encabezada por Rucci y Ernesto Inal, fue la única presentada y recibió un apoyo contundente.
La elección, realizada con voto secreto y registro informático, definió la nueva Comisión Directiva y la Comisión Revisora de Cuentas, cuyo mandato comenzará en diciembre de 2025. “Esto no fue un trámite: fue una demostración clara de conciencia colectiva, compromiso y lealtad a un modelo sindical que no se arrodilla”, destacó Rucci.
El dirigente subrayó que el respaldo masivo fortalece la conducción y reafirma su compromiso con la mejora de las condiciones laborales y la seguridad de los trabajadores petroleros.
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