La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, lanzó duras críticas contra la nueva alianza de gobernadores conocida como Grito Federal, calificándola como un “kirchnerismo de baja intensidad” durante un discurso en la Bolsa de Comercio de Córdoba. Sin nombrarlos directamente, Bullrich apuntó a los gobernadores Ignacio Torres (Chubut), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Martín Llaryora (Córdoba), Carlos Sadir (Jujuy) y Claudio Vidal (Santa Cruz), quienes buscan posicionarse como una tercera vía entre el gobierno de Javier Milei y el kirchnerismo.
“Dicen que son del medio, pero ahí hay uno peronista, un kirchnerista, un radical, uno del PRO. ¿Dónde están los del medio? Para mí es un kirchnerismo de baja intensidad, una especie de kirchnerismo suplente”, ironizó la ministra. Cuestionó la identidad del frente, afirmando que “eso del medio no me suena” y acusó a sus integrantes de “acompañar al kirchnerismo en todas las leyes”, lo que, según ella, los desdibuja como alternativa.
Bullrich defendió el programa económico del Gobierno y destacó la estrategia de “shock” aplicada en los primeros meses para lograr la estabilización. “El ajuste se hizo sobre un aparato estatal que oprimía a la sociedad, no sobre la vida de las personas”, aseguró, subrayando un “cambio cultural” que evitó una crisis social. Sin embargo, criticó resistencias de sectores económicos, sindicales y judiciales, como la Justicia del Trabajo, que “traba” la disolución de Vialidad Nacional. También cuestionó proyectos legislativos que aumentarían jubilaciones o declararían la emergencia en discapacidad, argumentando que contradicen la ley de Administración Financiera y podrían generar inflación.
La ministra instó a provincias y municipios a reducir sus gastos en proporción al ajuste del Estado nacional, advirtiendo sobre la necesidad de coherencia fiscal en todos los niveles.
En otro acto en Córdoba, durante la entrega de viviendas del plan Procrear a personal de Gendarmería Nacional, Bullrich reconoció la gravedad del problema habitacional en Argentina. “Los alquileres son altísimos y el acceso a la vivienda es un problema enorme”, afirmó. La ministra destacó las dificultades que enfrentan los gendarmes debido a la movilidad de sus destinos: “En El Chaltén alquilar una casa es dejar el sueldo. En Bariloche, en temporada, los alquileres se van para arriba”.
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