La concejala Cintia Frencia (PO, FIT) dijo este jueves que “rechamzos el presupuesto municipal por su carácter eminentemente ajustador y acompañaremos cada lucha que libre la clase obrera para oponer resistencia”, a la par que expresó que al igual que en la provincia, “impuestazos, ajuste y precarización son las líneas rectoras”.
Las declaraciones de Frencia se producen luego que el intendente Martín Llaryora ingresara al Concejo Deliberante de la Ciudad de Córdoba el paquete presupuestario para el 2022, suscitando “un escándalo con la oposición en la reunión preliminar informativa, debido a que previamente se dieron a conocer detalles del mismo a los medios de comunicación”.
Frencia apuntó que “el circo montado por el oficialismo y la oposición patronal del PRO y la UCR en el Concejo Deliberante de la ciudad, es una cortina de humo para ocultar que todos coinciden el ajuste y el mazazo al bolsillo de la población trabajadora que se preparan para 2022″.
Agregó que “la oposición patronal se retiró de la reunión informativa argumentando que el oficialismo violó la institucionalidad al dar a conocer detalles del presupuesto a los medios de comunicación, antes que a los propios concejales. Pero nunca cuestionó su contenido claramente ajustador. Esto es así porque son ellos mismos los principales impulsores de ese ajuste, la reforma laboral y el cumplimiento de las exigencias del FMI en la provincia y en el orden nacional”.
Siguió diciendo la concejala de izquierda que “el circo montado hoy no debe empañar que el presupuesto municipal es la imagen y semejanza del presentado por Juan Schiaretti en la Legislatura provincial. Impuestazos, ajuste y precarización son las líneas rectoras”.
Detalló que “sólo en el impuesto inmobiliario se registran subas promedio del 34%; por lo menos el 60% de los contribuyentes tendrán aumentos que llegarían hasta el 50%, a lo que se debe agregar los aumentos producidos por la recategorización compulsiva impuesta el año pasado, mientras la industria y la especulación inmobiliaria gozan de exenciones y congelamientos tarifarios. Por otro lado, se profundiza el ajuste a los salarios, la reducción del rubro personal al 40% del presupuesto supone nuevos ataques a los municipales. Por último, se pretende aprobar una nueva hipoteca para la ciudad sumando tres mil millones de pesos a la deuda actual de 150 millones de dólares”.
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