Después de 37 años siendo la marca indeleble del balón oficial de la NBA, Spalding decidió no continuar el vínculo millonario con la liga de básquet más importante del planeta y así, darle paso a Wilson. La empresa de Chicago, famosa también por sus raquetas -las usan Federer, Raonic o Azarenka, entre otros muchos- ya posee el dominio en el baloncesto de High School y, sobre todo, proporciona el balón oficial para el torneo de la NCAA.
No está claro por qué Spalding dejó de ser la marca oficial, ya que significa una enorme pérdida de ingresos para la empresa en tiempos de incertidumbre económica y financiera. El último contrato firmado hasta la temporada 2020/2021, le suponía unos 17 millones de dólares por temporada, además de un escaparate impagable, según informó el medio El Mundo.
Coincidiendo con el 75 aniversario de la NBA, Wilson volverá a ser el balón oficial, como en los inicios de la competencia allá por 1946, según el acuerdo anunciado la semana pasada. También de la WNBA, la G-League, el NBA 2K League y la Basketball Africa League. Es así, que recupera el multimillonario cetro que cedió en 1983, en esos años en los que la propia liga estaba escapando a lo grande de su peor época.
“Esta asociación con Wilson nos devuelve a nuestras raíces mientras planeamos el futuro”, proclamó Salvatore LaRocca, presidente de NBA Global Partnerships. “Nuestra pasión por este juego y la liga es increíblemente profunda. Nuestro compromiso de hacer crecer el juego de baloncesto en el escenario mundial es el corazón de Wilson y nuestra nueva asociación con la NBA”, agregó Kevin Murphy, Gerente General de Wilson Basketball.
En principio, no se esperan cambios radicales en las especificaciones físicas de la pelota, que Wilson está por desarrollar. La NBA y la Asociación Nacional de Jugadores de Baloncesto (NBPA) trabajarán con la marca a través de una junta asesora de jugadores, que proporcionará sugerencias a los ingenieros de Wilson.
LA REACCIÓN DE KEVIN DURANT
Uno de los primeros jugadores en reaccionar al cambio fue la estrella de los Brooklyn Nets, Kevin Durant, quien con tres palabras manifestó su total rechazo a la llegada de Wilson como nuevo fabricante de los balones de la NBA.
“¡Oh, diablos, no!”, escribió Durant como comentario a la publicación en Instagram del periodista de Yahoo Sports Chris Haynes sobre la noticia. Veremos si el ex Golden State Warriors se hace presente en la junta asesora de jugadores, para brindarle alguna recomendación a Wilson para la temporada 2021/2022. Si alguien sabe como tratar bien al balón, es él.
Mientras tanto, Spalding le cedió el trono más codiciado a su clásico rival, y de yapa un negocio multimillonario. Es verdad, la crisis económica que se prevé por la pandemia del Covid-19, bajará considerablemente las ganancias a comparación de los últimos años en la NBA. En tiempos de cambios, el show debe continuar y Wilson quiere ser parte, como aquella vez, donde Ossie Schectman anotó la primera canasta de la historia de la NBA, el 1 de noviembre de 1946.
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