Los argentinos siguen recontra divididos, en un Boca-River político y económico sin cortes. Una encuesta nacional realizada a fines de enero de 2024 por Zuban, Córdoba y Asociados, revela que el 54,4% de los argentinos cree que el presidente ultraderechista, Javier Milei, va en la dirección incorrecta durante sus primeros 50 días de mandato. En tanto, un 42,3% considera que transita el camino correcto. El dato manifiesta la buena salud de los dos bloques antagónicos que pugnan por la hegemonía en Argentina.
El trabajo de opinión pública también revela que la confianza en las políticas del presidente ya no es mayoritaria como ocurrió en el resultado expresado en el balotaje de noviembre del año pasado (55,65% versus 44,35% de la oposición). Una vez que comenzó la gestión el 10 de diciembre pasado, perdió sostén, pero la adhesión social a su rumbo parece haberse estabilizado al comparar las mediciones de diciembre 2023 y enero 2024. Así, los que creen que va en dirección incorrecta fueron 54,3% en el último mes del año pasado y 54,4% en el primer mes de este. Por otro lado, los que ven que camina en el sentido correcto cayeron levemente de 43,5 a 42,3%, una diferencia estadísticamente no significativa.
Comparado con la segunda vuelta, en la que resumió el apoyo de la ultraderecha y Juntos por el Cambio (JxC), es decir una situación particular en la que la sociedad se abroquela alrededor de sus candidatos más cercanos, pero no necesariamente con los que se identifica plenamente, Milei perdió 13,35 puntos porcentuales de adhesión. En cambio, el sujeto social que se diferencia del presidente, pasó de los 44,35% del voto obtenido por Sergio Massa en noviembre a 54,4% de los argentinos, una diferencia de +10 pp.
Se trata de datos que permiten aproximarse a la comprensión de la situación de relativa fragilidad del gobierno nacional, cuya fortaleza era justamente la “opinión pública”. Esta situación se suma a la extrema debilidad que padece el oficialismo en el campo de su estructura política, con bloques legislativos minoritarios en el Congreso. Sin embargo, la comparación de los dos trabajos de la consultora -diciembre 2023 y enero 2024- muestran una estabilización de las corrientes de opinión luego de la caída del primer mes de gobierno. Habrá que observar la evolución en las próximas semanas, a partir del tratamiento de la Ley Ómnibus y la consolidación de los efectos de las medidas económicas sobre los diferentes grupos sociales, para determinar cuál es la tendencia.
Cómo señalan los politólogos Gustavo Córdoba y Paola Zuban, “la imagen personal de Javier Milei y la de su gobierno han sufrido una caída desde su asunción hasta fines de diciembre con el impacto de las primeras medidas económicas. Sin embargo, entre diciembre y enero no han mostrado grandes variaciones, sosteniendo un 44,3% (la imagen de Milei) y 45,7% (la aprobación del gobierno nacional) de positividad. Estos datos cobran sentido a pesar de la pérdida de poder adquisitivo en este mes y medio de mandato, al considerar que casi la mitad de argentinos (45,9%) cree que la mala situación económica que atravesamos hoy es responsabilidad del gobierno de Alberto Fernández”.
Agregan los consultores, que, “por otro lado, lo que podríamos catalogar como “frame opositor” parece haber crecido a un ritmo moderado pero saludable. Que el paro nacional de la CGT cuente en nuestro estudio con un margen de diferencial positivo es una señal en ese sentido, sobre todo tomando en cuenta que los gremios eran de los actores públicos con peor valoración hasta hace meses. Sin embargo, enfrentado a una oposición que aún carece de un liderazgo claro capaz de capitalizar los errores del Gobierno, las propuestas y dichos de Milei parecen gozar de un piso de 30% a 35% de aprobación –el famoso tercio “núcleo duro”- con un techo aproximado del 45%, dependiendo de los distintos temas”.
OTROS DATOS CLAVE
Al comparar nuevamente los datos de los informes de diciembre 2023 y enero de 2024, los dos primeros meses del gobierno de Milei, surge que la “desaprobación” de la gestión fue de 55,4% en el último mes del año versus 53,9% en el primero. Si bien muestra un valor inferior, la diferencia no es estadísticamente significativa, ya que se encuentra dentro del margen de error de la medición.
Mientras que la “aprobación” pasó de 43,9% a 45,7%, una leve suba, aunque también estadísticamente no significativa. Habrá que ver si esta situación de “estabilización” se convierte en una tendencia o se trata apenas de una meseta temporaria.
Una pista que se mete en las cifras analizadas, es la de cómo los argentinos ven su situación económica personal dentro de un año. Allí aparece un crecimiento de 4,7 pp. entre los que consideran que va a estar “bien” o “igual de bien”, pasando de 38,1% en diciembre 2023 a 42,8% en enero 2024.
Del otro lado, el pesimismo pasó de 53,2% en diciembre 2023, a 51,5% en enero 2024. Una suave caída de 1,7 pp., pero dentro del margen de error.
Este tramo del estudio es relevante, dado que la conexión entre la situación económica personal presente y futura suele determinar o incidir sobre los comportamientos políticos. Por ahora, al deterioro inicial le siguió una estabilización relativa de las opiniones respecto del rumbo del oficialismo, todo a una velocidad vertiginosa, como resaltan los autores del trabajo. Lo que está claro, es que un núcleo optimista, con un volumen de 43%, es importante para sostener la credibilidad socio-política de un gobierno.
LA FICHA
Consultora: Zuban, Córdoba y Asociados.
Territorio: La encuesta se realizó en todo el país.
Instrumento de recolección de información: Cuestionario estructurado.
Técnica de recolección de información: CAWI.
Trabajo de campo: 25 y 26 de enero de 2024
Tamaño de la muestra: 1500 casos.
Error de muestreo: +/- 2.53%.
Nivel de confianza: 95%.
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Luis Giacone
5 febrero, 2024 a 08:10
Lo único que hay que hacer para terminar con la inflación, es bajar la tasa de interés al 8 %anual y dejar de dar a los bancos $ 200 mil millones por quincena, porque para ellos sí hay plata y la usan comprando dólar financiero.