Uber parece decidido a hacer lo quiere y desafía a instituciones argentinas (la Justicia y la Municipalidad de Córdoba) y a sus competidores (Taxistas y remiseros). Por medio de un comunicado de prensa, hizo saber ayer que el lanzamiento de la aplicación fue “sumamente positivo”, por lo que ratificaron (de hecho) que seguirán operando en la capital cordobesa.
Como si se tratara de una vieja guerrilla, desde la clandestinidad -no tiene dirección física en Argentina, la Justicia debió notificar a la empresa en una dirección de e-mail-, la aplicación de la multinacional con origen en Estados Unidos, desafía una decisión judicial local y continúa con la operación de transporte de pasajeros, que según su relato, es un acuerdo entre privados, no sometido a la regulación estatal.
Cabe recordar que la Cámara 2° en lo Contencioso Administrativo había dado aceptado un recurso de amparo solicitado por la Municipalidad de Córdoba e instado a la compañía transportista que dejara de prestar servicio hasta que se resuelva la cuestión de fondo. Esto es, si es legal o ilegal su servicio.
La empresa dice que no es una transportista de pasajeros, sino una aplicación digital que conecta pasajeros y choferes dispuestos a llevarlos. Sin embargo, además de conectarlos, luego de establecido el vinculo, gestiona la operación, la cobra y finalmente distribuye el dinero, quedándose con la mayor porción (75% si paga cero impuesto como pretende), y remunerando al chofer con un 25%.
“Desde hace al menos un año mantenemos reuniones con distintos actores a fin de construir consensos y buscar reglas claras que contemplen la naturaleza de la actividad de Uber. Esa fue siempre nuestra intención y hoy la reiteramos. En ese sentido, el día 9 de septiembre presentamos ante la Municipalidad de la ciudad una nota en la cual nos pusimos, una vez más, a disposición para reunirnos y continuar un camino de manera conjunta”, explica Uber sobre su conducta.
“Comunicamos en aquella nota el interés de los cordobeses en manejar y solicitar viajes a través de la aplicación de Uber, como también la voluntad contribuir con la generación de oportunidades económicas en Córdoba”, expresa en el texto.
“La reacción de los cordobeses ante el lanzamiento de Uber ha sido sumamente positiva, quienes hoy ven en Uber una oportunidad de generar ingresos y una nueva alternativa de movilidad que incorpora los beneficios de la tecnología. Seguiremos presentes, con la seguridad de que un proceso de diálogo es posible. Tenemos un compromiso con Córdoba y con quienes quieren un futuro de desarrollo, acceso e inclusión”, apunta el comunicado.
Si bien la Municipalidad ha secuestrado a siete vehículos de Uber desde que comenzó a operar el lunes pasado, nada de ello parece detener a la empresa estadounidense.
LO QUÉ ESTÁ EN DISCUSIÓN
-Uber dice que no es un transporte público y que su actividad no puede estar regulada por la ordenanza 12859, que establece las reglas de funcionamiento de taxis, remises y remises de lujo.
-La Municipalidad junto a taxistas y remiseros considera que Uber viola las disposiciones de la ordenanza y que su funcionamiento, por lo tanto, es ilegal.
-La Justicia provincial aceptó un recurso de amparo de la comuna para que Uber cese su funcionamiento hasta resolver la cuestión de fondo (si la actividad se encuadra o no en la ordenanza 12859).
-Un chofer de Uber presentó un recurso judicial para poder trabajar y dice que el servicio no es público, sino privado.
