La fábrica de grifería FV, la principal empresa del rubro en Argentina, dispuso la suspensión de 800 de sus 1.400 operarios durante una parte de los meses de mayo, junio y julio. La decisión se instrumentará en su planta de Pilar, en la provincia de Buenos Aires. La razón de la medida es la fuerte caída del consumo.
La política económica del gobierno ha disparado una crisis en la industria argentina. En marzo de 2024, el uso de la capacidad instalada tuvo su mínimo de los últimos 14 meses: 53,4%. La información fue brindada por el INDEC.
Según el cuadro comparativo mensual, en noviembre de 2023, el uso de capacidad instalada fue de 66,4% y a partir de allí se produjo una rápida disminución: diciembre 2023, 54,9%; enero 2024, 54,6%; febrero, 57,6%; marzo, 53,4%. Esa situación general es la que comienza impactar en el empleo.
El esquema acordado por la empresa con la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) contempla la reducción de la jornada por 10 días en mayo, 9 en junio y 10 en julio, con la paga de un 80% del salario neto.
En la fábrica de FV trabajan 1400 personas y producen 3.500 artículos de primer nivel, que se exportan a 25 países, incluido Brasil.
Entre enero y abril, los despachos de las empresas del Grupo Construya (entre ellas, FV, Loma Negra, Aluar, Plavicon y Klaukol) cayeron 33,1% interanual.
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