(Por Pablo Tissera *] La economía argentina ha venido dando muestras importantes de recomposición de la actividad, recuperando no sólo los niveles prepandemia sino que también ya ha regresado a los valores de principios de 2018 momento a partir del cual comienza a sentirse cada vez con más fuerza la debacle de las políticas neoliberales implementadas por el Macrismo. Esta recuperación, y no debemos cansarnos de decirlo, se dá a pesar de un contexto crisis mundial y nacional provocada por los efectos de la triple pandemia que arrastramos, la neoliberal/macrista, la del virus covid 19 y la de la guerra entre Rusia/Ucrania, cada una con sus particularidades atacando el buen desempeño de las políticas nacionales para el desarrollo económico.
Pero esta reactivación viene teniendo un talón de Aquiles, la inflación y su crecimiento por encima del aumento de los ingresos de la población que vienen perdiendo terreno desde finales del año 2015. Durante el mes de Abril el índice inflacionario alcanzó el 6%, con un acumulado interanual del 58%, lo que impacta negativamente en el poder adquisitivo de la ciudadanía en general aunque con mayor crudeza a quienes cuentan con un trabajo informal no registrado.
En nuestra provincia de Córdoba, el impacto es aún mayor pues los índices de pobreza e indigencia están por encima de la media.
LA ACTIVIDAD ECONÓMICA
Algunos datos que demuestran la mejora de la economía nacional podemos encontrarlos si analizamos lo que pasa por estos días en materia laboral, en la propia actividad económica, en el gasto público, en los niveles de recaudación fiscal y en la seguridad social.
Si comparamos en el cuarto trimestre de 2021 contra finales de 2019, se redujo el empleo no registrado (113 mil puestos) y subió el empleo registrado (456 mil), motivado entre otros aspectos por el crecimiento de la industria cuyo incremento fue del 7%, más que la economía en general debido a una política industrial nacional proactiva.
La actividad económica en el primer bimestre del 2022 registró un crecimiento del 7,1% con respecto a 2021 y si se compara con el primer bimestre 2020, justo antes de la pandemia sanitaria, también hubo una variación positiva del 4,7%.
Si tomamos el gasto público, componente clave de la política del gobierno nacional para la reactivación económica vía demanda, vemos el resultado favorable del programa REPRO orientado a las empresas para que no cerraran sus puertas, o del programa IFE 4 que alcanzará a 13,6 millones de personas a través de un ingreso familiar de emergencia por $18.000 a cobrar desde el 19 de Mayo hasta el 2 de Junio, orientado a a monotribustistas y trabajadores informales no registrados, y por $12.000 para jubilados y pensionados.
Los niveles de recaudación fiscal del primer cuatrimestre del año dan cuenta de esta evolución favorable de la actividad. El mes de abril, con una variación del 64% interanual, se convirtió, en términos reales, en el mejor mes desde 2015. El tributo que más contribuyó fue Ganancias.
También se destaca la Seguridad Social y las exenciones otorgadas para aliviar la carga tributaria al sector de la salud, a los sectores críticos del programa REPRO 2 y a las provincias del Norte Grande.
¿Esta recuperación es suficiente para mejorar la calidad de vida de la población?
La respuesta es no, porque hasta que no se resuelva el problema que tiene gran parte de la ciudadanía a la hora de llegar a fin de mes con sus ingresos no podemos decir que hemos alcanzado el objetivo del bienestar común de la población. Nos están faltando cinco para el peso cada vez un Argentino/a, Cordobés/sa no supere la línea de pobreza.
Entonces nos preguntamos qué políticas se requieren para que nuestros ingresos dejen de perder poder adquisitivo ante el actual proceso inflacionario.
Aquí retomo algunas propuestas y conceptos para contrarestar la inflación del diputado nacional del Frente de Todxs y presidente del Partido Solidario Carlos Heller vertidos en artículo publicado en Página 12 titulado “Ante las dificultades, avanzar” del pasado Domingo 15-5-22.
A la inflación debemos atacarla con diferentes medidas sumadas a las que se vienen tomando desde el gobierno nacional, todas aplicables a nuestra provincia:
– Sanciones a quienes incumplan los acuerdos de precios, particularmente a aquellas empresas oligopólicas formadoras de precios que pujan por apropiarse de las mejoras de los ingresos de la ciudadanía provenientes de las paritarias u otros mecanismos redistributivos como las multas a quienes no respetaron el acuerdo de Precios Cuidados.
– Políticas redistributivas que apunten a las rentas extraordinarias de agroexportadoras como el proyecto de impuesto a la renta inesperada.
– Desacople de los precios internacionales respecto de los nacionales con instrumentos como el Fondo de Estabilización del precio del trigo aplicado a otros productos.
– Avance en aquellos proyectos que gravan a los capitales fugados sin declarar como el presentado para pagar la deuda con el FMI.
– Promoción de la producción nacional y trabajo local como el proyecto de Compre Argentino por parte del Estado nacional aplicado a todos los niveles, territorios y también sector privado.
¿EL RUMBO ES CORRECTO?
La respuesta es sí, debemos continuar caminando hacia la consolidación de una alternativa a la nueva derecha conservadora, semicolonial y a aquella ultra derecha que también promueve el poder económico y los medios masivos de comunicación.
Debemos fortalecer la coalición del Frente de Todxs a nivel nacional y provincial que de batalla a la triple pandemia, ampliando las fronteras políticas, con una gestión que sea económicamente productiva, socialmente inclusiva, culturalmente nacional, popular, democrática y políticamente amplia, unida y solidaria,
Está claro que “es por acá”, lo que no quiere decir que todo esté todo bien, que no encontremos diferentes miradas sobre el cómo transitar el rumbo, pero sí que éste debe ser el rumbo timoneado por un Estado activo y presente que regule la economía y garantice los derechos adquiridos por la sociedad, que implemente medidas y leyes que permitan al pueblo conquistar nuevos derechos, siempre con la finalidad de desterrar el neoliberalismo de nuestra provincia y nuestro país.
* Pablo Tissera es dirigente cooperativista y secretario General Psol Córdoba.
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