El tenista cordobés Gustavo Fernández es uno de los deportistas que se manifestó en defensa del ENARD.
El tenista de Río Tercero, Gustavo Fernández, número 1 del ranking mundial de tenis adaptado y la gimnasta Anahí Sosa, ganadora de medallas en campeonatos sudamericanos y panamericanos para el país, se sumaron al reclamo de decenas de deportistas argentinos en defensa del ENARD. La campaña se desarrolla bajo la consigna #BanquemosalEnard.
Fernández dice en su cuenta de twitter que “El ENARD me cumplió el sueño, generó oporutnidad, nos puso en lo más alto. Yo y tantos más. No volvamos al pasado. Defendamos el presente y futuro del deporte argentino”, dice el el tenista cordobés.
Sosa afirma, a través de Facebook, que “Ojalá nosotras hubiésemos pertenecido a la generación de deportistas respaldados por el EnARD (el fondo de financiamiento se creó …) Antonella Yacobelli, Sandra Re, Aldana Di Costanzo, Roxana Marinoff, Alejandra Unsain, Soledad García, Luciana Eslava, Fernanda Raviña…”.
En la misma línea se había expresado la medallista dorada de Río 2016, la yudoca Paula Pareto: “Gracias ENARD por ayudarme y ser parte de mi equipo para llegar a cumplir un sueño. Gracias por permitirnos a los deportistas llevar nuestra bandera a los más alto para que todos los argentinos lo disfruten con nosotros como el gran equipo que somos. Todos tirando para el mismo lado. Para que esta gran alegría en el futuro deporte argenitno necesita del ENARD, por eso sigamos siendo equipo, sigamos tirando todos para el mismo lado. No volvamos al pasado. #BanquemosAlEnard.”
El post de Paula Pareto.
Los deportistas argentinos de diferentes disciplinas piden que no se derogue el artículo que graba con un 1% las comunicaciones por telefonía móvil en Argentina, vía con la que se constituye el fondo que financia las becas de desarrollo deportivo que el ENARD otorga a los deportistas amateurs. Estas becas permite el desarrollo de los mejores deportistas nacionales.
La gimnasta Anahí Sosa. Foto: Facebook.
“En noviembre de 2011 escribí estas líneas para La Voz Del Interior -(después de los Juegos Panamericanos de Guadalajara)-. Que las buenas políticas de Estado trasciendan los gobiernos de turno, que los procesos no se corten. Que esto no se acabe nunca”, escribió la cordobesa Sosa en otro posteo.
A continuación la columna que el diario publicó el 1 de noviembre de 2011:
“La actuación y la cosecha en Guadalajara demuestran que, si el proceso no se corta, el plan del Enard es el correcto para alcanzar la excelencia deportiva”.
“Una caída no es derrota. Dos, tampoco. Ni siquiera lo son tres. Desde hace una década y media, Argentina viene sufriendo estrepitosos descensos en los medalleros continentales, que ponen en evidencia la ausencia del Estado en los procesos de preparación deportiva”.
“Los resultados de los Juegos Panamericanos de Río 2007 (Argentina terminó octava con 11 oros) y de los Odesur del año pasado, en Medellín, Colombia, (la delegación nacional acabó cuarta y por primera vez en la historia se bajó del podio) marcan con objetividad la carencia institucional que ocasionó un estridente retroceso en nuestro deporte”.
“Quizá, la crisis deportiva local de los últimos años haya cristalizado la necesidad de aplicar una política estatal que sostenga al alto rendimiento dentro de una planificación sistemática e integral”.
Uno de los posteos de Sosa en Facebook.
“En octubre de 2009, el Congreso aprobó la construcción del Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Enard) con el objetivo de gestionar y coordinar apoyos económicos específicos para la implementación y desarrollo de las disciplinas de elite”.
“Este organismo autárquico, financiado con el aporte del uno por ciento sobre el precio del abono que las empresas de telefonía celular le facturan a sus clientes, vino a cubrir un espacio previsto por la Ley del Deporte, que fue posible con la llegada del presidente del Comité Olímpico Argentino, Gerardo Werthein”.
“El 1° de septiembre de 2010, el Enard se puso en marcha con un plan de becas, entrenamientos en el extranjero y competencias internacionales, como preparación para los Juegos de Guadalajara. Desde hace 13 meses, las necesidades materiales de los deportistas (en todas las ramas) vienen siendo cubiertas, con el afán de resignificar las medidas del complejo sistema del amateurismo”.
“Son 485 los representantes argentinos que defendieron en México los colores de nuestra Bandera y a lo largo de 16 jornadas acumularon 21 medallas de oro, que casi duplicaron la cosecha lograda en los Panamericanos de Brasil”.
“Más allá de las veces que las estrofas del Himno Nacional vibraron en tierras aztecas, se puede percibir, con tan sólo mirar el rostro y escuchar las declaraciones de los atletas, una motivación que trasciende al respaldo institucional económico; hay una contención humana que posiciona a los sujetos por encima del deportista”.
“Argentina viajó a Guadalajara con el desafío de recuperar su prestigio en América, con la ilusión de resurgir de entre las cenizas, luego de aquella opaca actuación en Río de Janeiro. Sin dudas, este primer paso confirma que se está encontrando el camino. Es que, si tras un año de planificación, los resultados marcan una ecuánime mejoría, ¿cuán positivas serían las consecuencias si se sostiene el modelo, más allá de gobiernos de turno y cambios de gestiones?”
“Como la punta de un iceberg, hoy vuelven a crecer las ilusiones de muchos deportistas acostumbrados a resignar objetivos. De la voluntad de los que soportan este proceso (y de los que lo soportarán en el futuro) dependerá la continuidad y el fortalecimiento de nuestro deporte amateur, a corto, mediano y largo plazo”.
VER LA COLUMNA PANAMERICANOS: COMO LA PUNTA DE UN ICEBERG.
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