Desde Libres y Diversas (Cba) y en articulación colectiva con la Mesa Coordinadora de la Marcha del Orgullo Disidente, hicimos frente, respondimos y nos convocamos ante la inminente situación de extrema violencia simbólica, psicológica, política y hasta física que atravesamos como comunidad LGBTTTIQ en el fin de semana del 28/06, en el marco del Día Internacional del Orgullo Disidente, en el Parque Sarmiento de Córdoba.
Muy alejado de ser un día de festejo y celebración, el hecho mencionado nos llamó a retrotraer, a la primera protesta masiva y revuelta ocurrida hace 51 años en Stonewall Inn, contra la represión policial, las razzias y abusos cometidos por las fuerzas de seguridad.
En nuestra capital, la “Docta”, el día sábado 27 y domingo 28 de junio, nos encontramos con aquellos sectores más rancios y conservadores de nuestra sociedad, grupos reaccionarios y auto-denominados “nacionalistas”; esos mismos que hace menos de dos años se opusieron al Proyecto de Legalización Voluntaria del Embarazo, anteriormente a la Ley de Identidad de Género, la Ley de Matrimonio Igualitario, la Ley Nacional de Educación Sexual Integral y podríamos continuar…
Así es, parece una obviedad, pero los anti-derechos siempre representan los mismos sectores. Y nuestra evidencia lo ratifica.
Ese día, lograron bajar nuestra bandera, con la situación de tensión generada, pusieron en riesgo nuestra integridad física. Se cedió ante la presión de esa minoría reaccionaria. Se vivió como un grave retroceso a nuestras reivindicaciones.
Pero con cinco denuncias unificadas (algunas tipificadas en el Código Penal), presentaciones formales al INADI, repudios masivos y contundentes, enorme cantidad de adhesiones a los comunicados de la Mesa Organizadora, apoyo genuino y atención en los medios masivos de comunicación, datan y reflejan un mensaje de interpelación social y política que le llegó de manera directa al neo-conservadurismo cordobés y de todo el país.
De este modo, gran parte de la sociedad civil se expresó y dijo a viva voz:
– “No a las ideologías del odio”.
– “Basta de discursos y prácticas violentas de grupos homo-lesbo-trans odiantes”.
– “Ni un paso más a la derecha reaccionaria (machista, patriarcal, Cis-Heteronormativa).
– “Ninguna agresión quedará sin respuesta”.
De manera sutil, pero evidente; la sociedad cordobesa y en algunas partes del país, nos vimos atravesados por la “Paradoja de la Tolerancia”, planteada por el filósofo Karl Popper (1945), frase que invita a la reflexión: “Si somos de una tolerancia absoluta, incluso para los intolerantes y si no defendemos la sociedad tolerante contra sus asaltos, los tolerantes serán aniquilados, y con ellos la tolerancia”.
Esta resignificación de lucha colectiva, recordó, y rememoró con “Orgullo Disidente” y crítico, las verdaderas demandas urgentes que atraviesa nuestra comunidad, por eso exigimos al Estado Municipal, Provincial y Nacional, políticas reales y concretas:
– Inclusión laboral travesti-trans.
– Registro Oficial de Violencias hacia el colectivo LGBTIQ+.
-Campañas masivas de comunicación contra la discriminación hacia el colectivo LGBITQ+.
-Abordaje integral de la niñez trans.
-Acceso a la vivienda para personas travestis y trans. Freno inmediato de los desalojos.
-Programas económicos y alimentarios para el colectivo LGBTIQ+.
-Mesa de articulación entre el Estado y las organizaciones LGBTIQ+.
-Aplicación y monitoreo de la Educación Sexual Integral.
—
>> Si estás de acuerdo con el periodismo crítico y comprometido, te invitamos a asociarte a ENREDACCIÓN, el sitio de noticias con información de Córdoba: INGRESÁ AQUÍ.
