En tiempos de pandemia, las competencias deportivas se vieron afectadas directamente y la mayoría decidieron suspender definitivamente su calendario. Sin embargo, nuestra Liga Nacional de básquet, al igual que varias ligas del mundo (como la NBA y la ACB), decidieron esperar el desarrollo del virus y así volver a las canchas con las medidas necesarias.
En ese contexto, la FIBA (Federación Internacional de Baloncesto) elaboró Return to Basketball, una guía con consejos para las Federaciones nacionales para poner en marcha el regreso de la actividad en medio de la pandemia del Covid-19. En la confección del documento participaron la OMS, un grupo de expertos que incluye miembros de la NBA, el Comité Olímpico Internacional y a un inmunólogo especialista en vacunas de la Universidad de Melbourne.
Luego de la decisión de suspender el 13 de marzo (hace 74 días) la Liga Nacional, todavía no existe una fecha probable de regreso, ni tampoco el posible protocolo en caso de reinicio. Hasta el momento, la única certeza de los 20 clubes que conforman la competencia, es que el próximo 1 de junio la AdC (Asociación de Clubes) decidirá si continúa o no la actual temporada.
Mientras tanto, la guía que elaboró la FIBA para las Federaciones que consideren volver a las canchas en tiempos de pandemia, postula dos fases claves para tener en cuenta. Además sugiere la concientización y capacitación para jugadores, cuerpo técnico, árbitros y oficiales de mesa sobre el Covid-19, entre otras cosas.
FASE INICIAL
“En la fase inicial se deben ofrecer oportunidades de entrenamiento individual de los jugadores-as con un mínimo de apoyo presencial de los entrenadores. Posteriormente, se puede comenzar a trabajar con grupos pequeños de jugadores-as, prestando especial atención a las pautas de distanciamiento y a la delimitación de zonas de entrenamiento específicas (“un-a jugador-a, un aro, un entrenador”)”, afirma el documento.
FASE FINAL
“En la fase final, podrá darse inicio a las sesiones de entrenamiento con el equipo completo, pero en un entorno limitado al staff estrictamente necesario. Posteriormente, cuando las autoridades públicas autoricen el inicio de las actividades deportivas, podrán comenzar a adoptarse enfoques más tradicionales para el entrenamiento y las competiciones”.
SEDES DE COMPETENCIA
El Ángel Sandrín repleto de hinchas albirrojos. Foto: FIBA.
- En las grandes sedes o competiciones, es necesario contar con un Comité de Dirección para la reanudación que se encargará de la planificación y periódicamente se reunirá para la evaluar los progresos.
- Deberá elaborarse un plan y una evaluación de riesgos para cada sede e instalación deportiva.
- Evaluar la ventilación de la instalación deportiva para determinar el nivel de seguridad de los asistentes y los espectadores (riesgo de difusión de aerosoles).
- Control de acceso y señalización (denegación obligatoria del acceso para personas con enfermedades virales agudas y fiebre, advertencia para los participantes en riesgo, control del número de asistentes, política de cierre del complejo deportivo, desinfectante de manos).
- Planificación del movimiento de los participantes, por ejemplo, mediante marcas de dirección en los corredores, zonas separadas para entrada y salida. Limitar el acceso a las instalaciones (cantinas, baños, vestuarios, duchas, salas para dirigentes, tiendas, otros).
- Pautas de distanciamiento social, por ejemplo, identificación de entradas, directrices sobre distanciamiento en multitudes, recuento de asistentes, limitaciones de acceso, pautas para el uso de asientos.
- Plan de limpieza, plan de supervisión, operacional y de cumplimiento de la bioseguridad.
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