“Cristina tiene hoy mejor imagen que el presidente de la República. Todo un síntoma de los tiempos que vivimos. CFK acertó en ponerse en un plano secundario. Cristina, lo único que ha hecho es callarse, creció con nada”. Gustavo Córdoba atiende el teléfono en la Ciudad de Buenos Aires. Acaba de iniciar el análisis de las razones de la reaparición de CFK en el escenario político en una situación “favorable” y la conversación saltará por distintos momentos. Dice: “No aprovecharse de Macri, le ha permitido recuperarse”. La encuesta de julio de Gustavo Córdoba & Asociados indica que Mauricio Macri tiene un 41,9% de imagen positiva y la de la ex presidenta llega a 48,1%. La que sigue es la parte sustancial de la entrevista.
VER Una encuesta señala que la imagen positiva de CFK supera a la del presidente.
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¿A qué se debe el crecimiento de la imagen positiva de CFK?
La recuperación de Cristina Fernández de Kirchner es merito exclusivo de (Mauricio) Macri. Con prudencia está al margen de la crítica, eso le ha permitido bajar la imagen negativa. No aprovecharse de Macri, le ha permitido recuperarse. Cristina tiene hoy mejor imagen que el presidente de la República. Todo un síntoma de los tiempos que vivimos. CFK acertó en ponerse en un plano secundario. Cristina, lo único que ha hecho es callarse, creció con nada.
¿Por qué tiene mayor impacto la situación política y económica en la imagen del presidente?
Al estar solo, al no poder tener un contendiente, los errores, la descontextualización de las medidas y la política de Cambiemos son muy visibles. Por eso se sostiene la negatividad.
¿Este escenario puede seguir aportando “negatividad” a la imagen presidencial?
Es un escenario negativo. No se han visto aún los efectos de las políticas concretas del FMI. Falta los efectos concretos. El aumento del dólar pega en las tarifas por los acuerdos con las petroleras. El gobierno no ha podido controlar la situación producida por la crisis cambiaria, no ha acertado. Sólo ha tenido algún respiro, pero hay crisis de confianza, malos manejos, errores y situación internacional desfavorable.
¿Cómo definís la situación del gobierno?
El gobierno no está atravesando su mejor momento. El cambio de ministros no le aportó valor, no ganaron espacios de maniobra. Hay persistencia de la negatividad, es un factor que marca con claridad la pérdida de confianza en el gobierno.
El gobierno no está atravesando su mejor momento. El cambio de ministros no le aportó valor, no ganaron espacios de maniobra. Hay persistencia de la negatividad, es un factor que marca con claridad la pérdida de confianza en el gobierno.
¿Por qué no acierta?
A mí criterio hay un exceso de voluntarismo de parte del gobierno. La sola enunciación no hace que la política se concrete. Un ejemplo: al principio de la gestión enumeró el objetivo de alcanzar “Pobreza Cero”, sin embargo ¿cuántas medidas administrativas generó el gobierno tendientes a hacer esa política? Poquísimas. Hay un defecto respecto de la creencia de lo que son las políticas públicas o un exceso de voluntarismo, donde creen que el sólo hecho de enunciarlas les hace creer que la política se va a concretar. Cualquier política pública requiere de medidas, acuerdos, consensos, trabajo en común con muchos actores. Eso no está sucediendo.
¿La negatividad es sólo para el presidente o para el conjunto de la clase política?
Hay un incremento de la negatividad en general. La gente cree que todos tiene un desempeño muy poco lucido frente a la crisis económica.. Además de CFK, María Eugenia Vidal ha recuperado un poquito; también Sergio Massa. Pero el conjunto es afectado por la negatividad.
Una eventual profundización de la crisis va a afectar tanto el oficialismo como la oposición. Los desaciertos del gobierno y la renuencia de la oposición a acompañar son castigados por la sociedad.
¿Qué quiere decir, que los errores del gobierno afectan al conjunto del sistema político?
Hoy le conviene más a la oposición facilitarle la tarea de que llegue hasta el final de su mandato lo mejor posible. Una eventual profundización de la crisis va a afectar tanto el oficialismo como la oposición. Los desaciertos del gobierno y la renuencia de la oposición a acompañar son castigados por la sociedad. Creo que hay que buscar puntos de acuerdo para salir de este momento. Por ejemplo, se ha instalado la idea de “no gastar más de lo que se tiene”. Un punto de partida sería cómo hacemos para llevar esa política adelante. El gobierno peca de soberbio de querer hacerlo sin acuerdo y sin política.
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