Un diputado nacional fue golpeado y afectado por los gases lacrimógenos que las fuerzas de seguridad lanzaron contra los manifestantes que se oponían al tratamiento de la Ley Ómnibus en el Congreso Nacional. Se trata del legislador jujeño del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS)-FIT, Alejandro Vilca. También fue agredido el dirigente del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, que se desvaneció por los golpes que recibió mientras participaba de una sentada. En la noche, fueron detenidas cinco mujeres, una de ellas militante de la UCR.
“La UCR exige la inmediata liberación de la militante de nuestro partido Ivana Bunge y las otras jóvenes detenidas junto a ella en la zona del Congreso por manifestarse pacíficamente”, reclamó el comité nacional de ese partido.
Mientras que Vilca denunció horas antes, en el recinto, durante el desarrollo de la sesión en la que se trataba la Ley Ómnibus la agresión que había recibido: “Quiero hacer una cuestión de privilegio contra (la ministra de Seguridad) Patricia Bullrich. Es escandaloso lo que está sucediendo afuera mientras el pueblo trabajador se expresa. Nos tiraron palos y gases”.
“Si es ese el plan que tiene Patricia Bullrich, no me imagino lo que va a hacer una vez que esta Ley se apruebe. Tienen que parar este operativo, es imposible que siga una discusión de esta manera. Actuaron tres fuerzas federales, hay muchos detenidos. Esto tiene que parar, es una vergüenza”, planteó el legislador del FIT.
El avance sobre los manifestantes de los uniformados, incluso con carros hidrantes, se produjo en dos etapas en las últimas horas de la tarde, operativos en los cuales además hubo un detenido, un ciudadano chileno de unos 30 años, según informaron fuentes policiales.
Pese a las órdenes que recibieron las fuerzas de seguridad de desalojar las calles adyacentes al edificio parlamentario, las arterias quedaron igualmente ocupadas tanto por los efectivos como por los manifestantes.
Inicialmente hubo un avance de gendarmes y policías sobre la multitud y se registraron escaramuzas entre ambos sectores en la pugna por los espacios, pero luego los ánimos se calmaron en medio de la movilización que se sostenía en una tarde en la que la temperatura superaba los 35 grados.
Luego de las protestas, cientos de agentes de seguridad se instalaron en la noche del miércoles en torno al Congreso, donde los diputados reanudarán este jueves el debate de la Ley Ómnibus.
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