“No estamos apoyando a (el presidente Mauricio) Macri, solo queremos que aquella vieja izquierda no vuelva al poder. Y si el camino fuera apoyar a Macri, que sea el apoyo a Macri”. Las palabras pertenecen al presidente de Brasil Jair Bolsonaro, que interviene de modo reiterados en el desarrollo de las elecciones argentinas. Su pedido estuvo dirigido a un importante grupo de empresarios metalúrgicos de San Pablo y tiene la intención de influir en la política argentina para intentar modificar el resultado adverso al macrismo en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del pasado 11 de agosto.
“En las primarias hubo un margen grande para la oposición argentina y el mercado reaccionó inmediatamente. Eso puede ser revertido y les pido a los que están aquí que colaboren en ese sentido”, les pidió Bolsonaro a los empresarios de la industria del acero en el evento Congreso Acero Brasil.
El mandatario brasileño sigue la línea planteada por Macri al día siguiente de su dura derrota en las PASO: que la reacción de los mercados fue culpa de la victoria por más de quince puntos del Frente de Todos que encabeza el candidato presidencial Alberto Fernández.
“El compañero de fórmula de Cristina Kirchner ya retrocedió, dijo que no puede apartarse de Brasil por una cuestión económica. En economía podemos caminar juntos, pero en la cuestión política jamás. Si se desvían del foco de la democracia y la libertad tomaremos una posición política también”, afirmó el presidente brasileño.
Alberto Fernández dijo ayer que “fue un error mío (contestarle a Bolsonaro), me dejé llevar por la lógica de Bolsonaro. Brasil es más importante que cualquier enojo mío con un presidente”.
Bolsonaro equipara al peronismo con el Partido de los Trabajadores y con el presidente Lula Da Silva. Además, tanto Fernández como la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner pidieron la libertad de Lula.
El domingo, el primer mandatario brasileño había escrito en cuenta de Twitter que “con el posible regreso de la gente del Foro de San Pablo a Argentina, el pueblo va en masa a retirar su dinero de los bancos. Es Argentina, cada vez más próxima de Venezuela”. Y a continuación agregó en un nuevo tuit: “Quien labra su tierra tendrá comida con hartura, quien persigue fantasías se hartará de miseria”.
Mientras que en una entrevista al diario Clarín, el ministro de Exteriores de Brasil, Ernesto Araújo, siguió el mismo tono, pese a que Fernández había señalado que las relaciones en el marco del Mercosur ya no serían iguales al pasado: “Eso que dice, que no necesariamente será igual a como fue el gobierno de Kirchner, yo, para usar una imagen, lo veo como a una muñeca rusa. Está Alberto Fernández, lo abres y está Cristina Kirchner, la abres y está Lula, y después [Hugo] Chávez. No tenemos ilusión que ese kirchnerismo 2.0 sea diferente del kirchnerismo 1.0”.
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