El embajador en China, el economista Diego Guelar, pidió a través de su cuenta de Twitter, que es necesario “garantizar gobernabilidad”. En la misma línea se expresó el intendente de San Isidro, Gustavo Posse. Por su parte, Mario Negri dijo que “hay que actuar con inteligencia política”.
El contundente respaldo electoral que obtuvo el peronismo para derrotar al presidente Mauricio Macri, en las elecciones primarias de este domingo, ha disparado un debate interno en el gobierno y entre los empresarios. El presidente junto con su jefe de Gabinete, representan la línea dura de continuar con la confrontación electoral y consideran, según las fuentes oficiales, que se debe intentar llegar a segunda vuelta electoral. Esa tesitura es la que primó ayer, por eso, en la conferencia de prensa, Macri culpó al peronismo de la brutal devaluación de 23% en un día.
A su vez, la reacción de los mercados luego de la victoria de Alberto y Cristina, que además de la corrida cambiaria, golpeó el precio de las acciones, aumentó el riesgo país hasta el nivel más alto de la gestión Macri, y obligó al BCRA a pagar tasas de interés superiores a los 70 puntos, también motorizó las disidencias.
Dentro de ese contexto, el pedido más significativo fue el del embajador argentino en China, Diego Guelar, un macrista histórico y un experto en política internacional. Además, la República Popular China es una de las socias comerciales más importantes del país.
“Imperativo actual es garantizar gobernabilidad de aqui al 10-12!!! El gobierno saliente y el entrante tienen responsabilidad compartida para evitar una debacle mayor. Tengo confianza plena en la grandeza y el patriotismo del presidente Macri para convocar a la unidad nacional”, escribió Guelar.
También se expresó en tono similar, el titular del interbloque de Cambiemos en la Cámara de Diputados, Mario Negri: “Si demostramos que somos una democracia madura, creo que debemos actuar con inteligencia política en términos de gobernabilidad porque este es un país que está sufriendo una crisis de máxima vulnerabilidad. Por supuesto esto es tanto para el Gobierno, que tiene la máxima responsabilidad, como para los que en las PASO han salido victoriosos. Hay que actuar en términos de mensajes de un país normal, que no haya disparadas cambiarias, zozobras en los mercados, en la gente. En la medida en que haya voluntad política del oficialismo y de la oposición esto será posible. En octubre hay que competir, si el Gobierno aspira a mejorar debe hacer un repaso sereno del malestar de la sociedad. Porqué se planteó, cuál es el orden de prioridades, está claro que la economía tiene una incidencia mayúscula”.
Mientras que el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, que fue junto a Jorge Macri el único jefe comunal del Conurbano que ganó en las PASO, también se mostró a favor de la transición. “Es necesario un acuerdo rápido de la dirigencia”, señaló.
En la misma línea se expresó un sector empresario. José Urtubey, dueño de Celulosa Argentina y miembro de la Unión Industrial Argentina, opina que para las elecciones de octubre no se esperan cambios en los resultados. “La economía es lo que primó en el voto y el Gobierno no tuvo un plan económico que incluyera a todos”, expresó en declaraciones a medios porteños. El dirigente industrial señaló que espera que haya diálogo entre el presidente en ejercicio y el principal candidato opositor. “Tiene que haber una madurez para la transición por parte del Gobierno nacional porque es el que tiene mayores responsabilidades”, diferenció.
A su vez, hacia el interior del Ejecutivo, aparecen fisuras. El ex ministro de Producción y actual asesor presidencial, Francisco Cabrera, fue uno de funcionarios que propuso empezar a ordenar el Gobierno para abandonar el poder de la mejor manera. Amigo de Macri, Cabrera, habló con colegas del gabinete con la premisa de preparar la salida del gobierno a fin de año.