La campaña del kirchnerismo tiene dos temas en procesión: por un lado, las actividades de campaña con los dirigentes que vendrán a la provincia (Alberto y Sergio Massa están confirmados y se evalúa que Cristina Fernández de Kirchner presente su libro en Córdoba), los lugares en donde poner intensificar las acciones para descontarle votos al presidente Macri y los ejes del discurso; y por otro, la permanencia o la salida de Franco Saillén de la lista de diputados nacionales del Frente de Todos. Tanto el primero como el segundo punto, terminarán de definirse en el Instituto Patria y en las oficinas de Alberto Fernández, en el barrio de San Telmo.
La suerte de Franco Saillén, el hijo del detenido secretario General del SURRBAC, Mauricio Saillén, de la lista de candidatos a diputados nacionales del Frente de Todos (FdT), depende ahora de esas resoluciones. El límite para saberlo será el próximo sábado 9, cuando se oficialicen las nóminas en la Justicia Electoral. Así se lo confirmaron a este medio, fuentes locales y de Buenos Aires.
Saillén es el quinto candidato a diputado nacional en la boleta del Frente de Todos. Se ubica detrás de Eduardo Fernández, Gabriela Estévez, Pablo Chacón y Mirta Iriondo. El dirigente sindical y legislador provincial, ya manifestó que es una operación política contra el gremio de los recolectores por su posición y movilización anti-macrista.
El tema de su continuidad en la lista kirchnerista se debatió entre los distintos referentes locales del kirchnerismo, tal como lo había adelantado Eduardo Fernández a Cadena 3 a inicio de esta semana, pero se trata de un tema que excede Córdoba.
Más allá de su situación judicial, donde está imputado en la causa en la que se investiga lavado de activos, usura y administración fraudulenta en la Mutual del SURBBAC, y por la que están detenidos Saillén padre y Pascual Catrambone, su candidatura genera un problema político-electoral que podría impactar en las chances electorales de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner en Córdoba. Y con ello, las posibilidades de sumar a Chacón entre los diputados electos.
Según señalan todos los voceros que aceptan referirse a este tema, nadie cuestiona el principio de la presunción de inocencia, pero hacen hincapié en el problema político-electoral que dispara el expediente que instruye el fiscal Enrique Senestrari en Tribunales Federales.
Saillén llegó allí a último momento y con el apoyo de La Cámpora; y por ahora se mantiene en ese lugar por la misma razón. A su vez, la lista se conformó en el Instituto Patria, entre el propio Alberto Fernández como referencia del peronismo más moderado y Máximo Kirchner y Wado De Pedro por el kirchnerismo.
Por eso, Eduardo Fernández había dicho en la entrevista con Cadena 3 que “le expresamos (a Saillén) nuestra preocupación con respecto a la situación, pero no hemos avanzado más en este sentido. En el caso de la lista, no fui yo el que la confeccionó ni el que tendría que hablar, pero vamos a conversarlo entre todos esta semana”.
Franco Saillén, Alberto Fernández, Mauricio Saillén y Pascual Catrambone.
El otro Fernández, Alberto, el candidato a presidente, se tomó una foto en el Senado nacional con el senador Carlos Caserio, los intendentes de Villa María y La Calera, Martín Gill y Rodrigo Rufeil, y un grupo de legisladores cordobeses, al otro día de las detenciones de Saillén padre y Catrambone, en Córdoba. La foto en la que aparece rodeado por los dos detenidos y Franco Saillén en el estadio Órfeo, en el cierre de las PASO, impactó en el equipo de campaña del candidato presidencial, que lo llevó a armar una nueva escena que contrarrestara la anterior.
Alberto Fernández y Carlos Caserio junto a intendentes y legisladores cordobeses en el Senado.
Una consecuencia del operativo judicial contra la cúpula del SURRBAC fue justamente la decisión de recostarse en el PJ para desarrollar la campaña electoral para los comicios del 27 de octubre. Se sabe, el peronismo cordobés juega a dos puntas: a la lista corta de Juan Schiaretti y a la boleta nacional que encabezan los Fernández.
Una obsesión de Alberto es descontar la diferencia que Macri le lleva en Córdoba (18 puntos) y disputarle la victoria en una provincia que fue clave en los comicios de 2015 y 2017 en favor del macrismo. Hasta tal punto es relevante el tema, que se preocupa personalmente por mantener el diálogo con el gobernador Schiaretti y decidiría junto a la misma Cristina si es conveniente que presente su libro “Sinceramente” en esta provincia.
Cristina tiene la intención de desembarcar en Córdoba con su libro, con el que está recorriendo el país. Dirigentes kirchneristas confirmaron a este medio que la ex presidenta vendría a Córdoba, pero aquí el albertismo ha tomado el control general de la campaña y hasta este martes no había todavía una definición acordada de que la candidata a la vicepresidencia llegará aquí a hacer campaña.
Alberto Fernández y Sergio Massa en la autopartista Favicur durante una de las visitas de campaña en las PASO.
Uno que sí estará en Córdoba el 15 de septiembre, en la misa en memoria del gobernador José Manuel De la Sota, al cumplirse el primer aniversario de su trágico fallecimiento, es Sergio Massa. En el acto litúrgico está trabajando la legisladora provincial electa, Natalia De la Sota, y no se descarta que hasta el propio Alberto esté en la Catedral cordobesa, donde se estima que se realizaría. Sin embargo, al menos por el momento, sería una gran puesta en escena del peronismo cordobés, por lo que habrá que ver hasta dónde se estira la lista de invitados.
Massa y otros dirigentes del peronismo recorrerán la provincia más de una vez. La idea de Caserio y el sector del PJ que apoya a Fernández, es que la campaña se desarrolle en el interior, sobre todo en las ciudades de la Pampa Húmeda que han sido sostén del macrismo. También reforzarían la capital provincial. Todavía la agenda no está definida y en el kirchnerismo estiman que alguno de los viajes de Alberto, será para desarrollar actividades de campaña con la lista del Frente de Todos.
El kirchnerismo cordobés continuará trabajando sobre el eje económico, y reforzará su mensaje sobre los sectores sociales más castigados por la crisis. Dicen que el tono del discurso será rescatar el espíritu del kirchnrismo fundacional, el que representó Néstor Kirchner.
